• Canadá es el principal origen del acero importado por EU, seguido de México, Corea del Sur, Brasil y Vietnam, según datos del Instituto Americano del Hierro y el Acero.
Ciudad de
México.- El presidente estadounidense Donald
Trump cumplió este lunes su promesa de imponer aranceles del 25% a las
importaciones de acero y aluminio.
"Hoy
simplifico nuestros aranceles sobre el acero y el aluminio", dijo Trump en
el despacho oval mientras firmaba las órdenes ejecutivas. "Es un 25%,
sin excepciones ni exenciones".
Trump añadió
que sopesaría imponer aranceles adicionales a automóviles, productos
farmacéuticos y chips informáticos.
"Esto es
importante, vamos a hacer Estados Unidos rico de nuevo", indicó el
mandatario.
La Casa
Blanca aseguró que los aranceles serán aplicados a nivel global y que
no habrá excepciones a ningún país en importaciones de acero y aluminio.
“Aplica a
todos los países, sin importar de dónde venga. Sin embargo, si se produce en
Estados Unidos, no habrá aranceles. Todo lo que tienen que hacer es producirlo
en Estados Unidos. No lo necesitamos de ningún otro país. No
necesitamos el acero de Canadá. Traeremos de regreso a nuestras industrias,
nuestros empleos”, señaló Trump.
El mandatario
agregó que se reunirá con su equipo “en las próximas cuatro semanas, quizá
semanalmente, quizá cada dos semanas, para sopesar otras opciones de aranceles,
como automóviles, productos farmacéuticos y chips informáticos. “Todo eso
traerá muchos trabajos a nuestro país”, aseguró.
“Será
increíble para nuestro país, para nuestros empleos. Traerá un nuevo nivel
de prosperidad” a Estados Unidos, insistió Trump.
Canadá es el
principal origen del acero importado por EU, seguido de México, Corea del Sur,
Brasil y Vietnam, según datos del Instituto Americano del Hierro y el Acero. En
cuanto al aluminio, Estados Unidos obtiene casi dos tercios de su suministro de
Canadá, de acuerdo con la Asociación del Aluminio.
Durante su
primer mandato, en 2018, Trump impuso aranceles del 25% a las
importaciones de acero y del 10 % a las de aluminio, aunque luego concedió
exenciones a países como Australia, Brasil, Canadá y México.
Esta vez, la
Casa Blanca no ha aclarado si habrá excepciones.
Trump ya
adelantó el domingo que tenía intención de imponer nuevos aranceles al acero y
el aluminio en declaraciones a periodistas a bordo del avión presidencial Air
Force One, antes de asistir a la final del Super Bowl en Nueva
Orleans (Luisiana).
Previamente
adelantó que "probablemente este martes o miércoles" anunciaría
aranceles recíprocos a varios países para equiparar los gravámenes que estos
aplican a las exportaciones estadounidenses.
No especificó
qué países se verán afectados por esos aranceles recíprocos, aunque el
presidente ha criticado en reiteradas ocasiones el 10 % que la Unión Europea
impone a los automóviles importados, muy por encima del 2.5% que aplica Estados
Unidos.
La medida
anunciada hoy es un nuevo ejemplo de su estrategia para utilizar los aranceles,
que en más de una ocasión ha calificado como "la palabra más hermosa en el
diccionario", como herramienta de negociación para obtener concesiones
concretas no solo en comercio, sino también en cuestiones de migración y
seguridad.
El mes
pasado, Trump anunció aranceles a productos colombianos tras la
negativa del presidente Gustavo Petro a aceptar un vuelo con migrantes
deportados encadenados, pero dio marcha atrás cuando Colombia acordó seguir
recibiendo los vuelos de deportación.
Asimismo, la
semana pasada, Trump anunció que pospondría durante un mes la aplicación de un
arancel del 25% que había anunciado sobre todos los productos de Canadá y
México, tras un acuerdo con ambos países para reforzar el control
fronterizo y frenar el tráfico de fentanilo y la llegada de
migrantes.
Trump, sin
embargo, sí llegó a imponer un arancel adicional del 10 % a China, que se suma
a los ya vigentes desde su primer mandato sobre productos del gigante asiático,
lo que llevó a Pekín a anunciar más gravámenes en represalia.