• Se destacan ya en el PAN en la búsqueda por la gubernatura Edith Aguilar, Susana Zatarain y Lupita Saldaña. • La más débil y desacreditada es la diputada Lupita Saldaña, la preferida del dirigente Rigo Mares • La competencia interna que se ya se registra desde ahora, puede fracturar más al ánimo del panismo sudcaliforniano.
Uno de los
temas que ya se mueve en las mesas de análisis de los diversos partidos
políticos, es el comportamiento electoral que tendrán las mujeres y en el PAN
esto no es la excepción.
En el
blanquiazul existen tres damas destacadas que intentarán figurar en el proceso
interno de su organismo partidista para levantar la mano como abanderadas a la
gubernatura de la entidad.
Estas féminas
son la alcaldesa de Mulegé Edith Aguilar Villavicencio, la diputada local y
exdirigente estatal panista, Lupita Saldaña Cisneros y la actual senadora
Susana Zatarain.
Estas figuras
ya desde ahora impulsan sus esfuerzos al interior del panismo para tratar de
erigirse con la candidatura a la máxima posición política de la entidad.
Obviamente de
estas tres propuestas femeninas la que menos posibilidades tiene de ser
abanderada, es la actual diputada local Lupita Saldaña que aunque cuenta con
todo el apoyo y preferencia del dirigente Rigo Mares, hasta ahora su papel ha
dejado mucho que desear.
Lupita
Saldaña ante Edith Aguilar y la senadora Susana Zatarain, poco tiene que hacer.
Por supuesto
que la actual diputada local y pésima exdirigente estatal del PAN tratará a
toda costa de salirse con la suya, pero realmente tendrá muy complicada esta
batalla que ya desde ahora se ve muy cuesta arriba.
Tal como ya
sucede en otros organismos, las aguas políticas se mueven y aunque es con menor
intensidad, lo cierto es que estas mujeres no pierden de vista, ya desde ahora
la posibilidad de encabezar los esfuerzos del blanquiazul.
Por supuesto
será muy interesante ver cómo se desenvuelve el dirigente Rigo Mares quien
tiene toda su preferencia volcada hacia la actual legisladora local, pero
seguramente las fuerzas internas de este organismo tratarán una vez más de
sacudirse la dañina influencia de Saldaña Cisneros.
Obviamente
habrá una lucha campal por todas las ´posiciones que estarán en juego, pero
para el caso de la gubernatura, algunos tienen ya su obsesionada visión puesta
en el arrancadero panista.
Es claro que
en esta ocasión como nunca antes, las damas tendrán la oportunidad de encabezar
los esfuerzos políticos del panismo a pesar del conservadurismo que aún se
observa en este organismo.
Veremos si
esta competencia interna que se ya se registra desde ahora, no fractura más al
ánimo del panismo sudcaliforniano que pasa por una de sus etapas más grises en
los últimos años.
Teórica
oposición que no pasa de meras especulaciones con intrascendentes acciones que
difícilmente los llevará a conformar una propuesta realmente competitiva.
Sin embargo,
está claro que son justamente las mujeres azules las que pudieran hacer, en
esta ocasión, dentro de la lógica panista, la verdadera diferencia.
Ya veremos.