•Trump admitió que podría haber “algo de dolor”, pero que “valdrá la pena” y luego repitió que "Canadá debería convertirse en nuestro querido estado número 51”. Los dos países vecinos respondieron a los aranceles de 25% impuestos por el republicano.
Ciudad de México.- Después de que el presidente, Donald Trump, firmara este sábado 01 de febrero la orden para imponer aranceles elevados a las importaciones de México, Canadá y China, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció que respondería con sus propios aranceles y rechazó la sugerencia de Trump de que hubiera alianzas entre el Gobierno mexicano y grupos criminales.
Por su parte, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, anunció este sábado que su Gobierno impondrá aranceles del 25% sobre importaciones de Estados Unidos por valor de 155,000 millones de dólares en represalia.
Trump defendió su decisión este domingo alegando que los tres países han “robado” a Estados Unidos “durante décadas” y después cuestionó: “¿Habrá algo de dolor?”. Y respondiendo a su propia pregunta, dijo: “SÍ, TAL VEZ (¡O QUIZÁS NO!). PERO HAREMOS EE.UU. GRANDE DE NUEVO Y EL PRECIO QUE TENDREMOS QUE PAGAR VALDRÁ LA PENA”.
Luego, en otro mensaje en su cuenta de su red social Truth Social, Trump añadió que sin un "subsidio masivo" que EE.UU. da a Canadá, éste "deja de existir como país viable. ¡Es duro pero cierto! Por lo tanto, Canadá debería convertirse en nuestro querido estado número 51".
La orden de Trump ha despertado los temores de que se desate una mayor inflación y afecte a las empresas de toda América del Norte.
La medida también incluye un mecanismo para aumentar los aranceles si los países toman represalias contra Estados Unidos, como posiblemente están dispuestos a hacer.
La decisión pone a la economía global y al propio mandato político de Trump de combatir la inflación bajo la sombra de las dudas, aun cuando el presidente republicano publicó en las redes sociales que era necesario "proteger a los estadounidenses".
Los aranceles aduaneros amenazan con desatar un enfrentamiento económico con los dos mayores socios comerciales de Estados Unidos, México y Canadá, lo que trastocaría una relación comercial de décadas con la posibilidad de duras represalias por parte de esas dos naciones.
En un mensaje publicado en la red social X, la mandataria mexicana también rechazó "categóricamente" lo que consideró calumnias de la Casa Blanca sobre México, país al que acusó de "tener alianzas con organizaciones criminales".
"Si en algún lugar existe tal alianza es en las armerías de los Estados Unidos que venden armas de alto poder a estos grupos criminales, como lo demostró el propio Departamento de Justicia de Estados Unidos en enero de este año", afirmó la presidenta mexicana.
"El consumo y la distribución de drogas está en su país [Estados Unidos] y ese es un problema de salud pública que no han atendido", subrayó.
Sheinbaum añadió que "debemos trabajar conjuntamente de forma integral, pero siempre bajo los principios de responsabilidad compartida, confianza mutua, colaboración y sobre todo, respeto a la soberanía, que no es negociable. Coordinación sí; subordinación, no".
Los aranceles entrarían en vigor el martes 4 de febrero, lo que provocaría un enfrentamiento en Norteamérica que podría sabotear el crecimiento económico.
Un nuevo análisis del Laboratorio de Presupuestos de Yale expuso el posible daño a la economía estadounidense, al afirmar que el hogar estadounidense medio perdería el equivalente a 1,170 dólares en ingresos por las tarifas. El crecimiento económico se ralentizaría y la inflación empeoraría, y la situación podría ser peor si Canadá, México y China toman represalias.
Trudeau declaró más temprano ayer sábado que Canadá "está preparado" para hacer frente a los aranceles anunciados por Trump.
En un mensaje en su cuenta de Twitter, indicó que estaba a punto de hablar con la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, sobre la decisión de la Administración estadounidense, y que más tarde hablaría con los canadienses.
"No queríamos esto, pero Canadá está preparado", aseguró.
Por su parte, Pierre Poilievre, líder del Partido Conservador de Canadá y candidato a primer ministro, criticó duramente la imposición de aranceles por parte de Trump, afirmando que "no hay justificación alguna para este trato" e instó al Parlamento a dejar de lado los intereses partidistas y aprobar un "Plan Canadá Primero".
El plan de seis partes de Poilievre, presentado en un mensaje en la red social X, incluía tomar represalias contra Estados Unidos con "aranceles dólar por dólar", invertir el dinero recaudado de los aranceles en los trabajadores y empresas afectados, aprobar una rebaja fiscal "masiva" y reconstruir las fuerzas armadas canadienses.
También incluye "recuperar el control de nuestras fronteras para renovar la confianza de nuestros socios, afirmar nuestra soberanía, proteger a nuestro pueblo y poner a Canadá en primer lugar".
Por el momento, México mantiene la calma mientras sopesa sus opciones.
Sheinbaum, que apareció este sábado 01 de febrero en un acto de promoción de un programa de vivienda del Gobierno en las afueras de Ciudad de México, dijo: "Estoy tranquila, lo he estado diciendo desde ayer, porque sé que la economía de México es muy poderosa, muy fuerte".
Un alto funcionario de la Administración Trump, que insistió en el anonimato para informar a los periodistas, señaló que la tarifa más baja en el caso de la energía reflejaba el deseo de minimizar cualquier aumento en el precio de la gasolina o los servicios públicos. Esa es una señal de que los funcionarios de la Casa Blanca entienden la apuesta que están haciendo con la inflación. Los picos de precios bajo el expresidente Joe Biden provocaron frustración en los votantes, lo que catapultó a Trump de vuelta a a la Casa Blanca el año pasado.
La orden firmada por Trump no contenía ningún mecanismo para conceder excepciones, indicó el funcionario, un posible golpe para los constructores de viviendas que dependen de la madera canadiense, así como para los agricultores, los fabricantes de automóviles y otras industrias.
La Administración Trump ha dicho que impuso los aranceles para obligar a los tres países a detener la propagación y la fabricación de fentanilo, además de presionar a Canadá y México para que limiten la inmigración ilegal a Estados Unidos.