Los Estados Unidos cumplió con su promesa de campaña, posteriormente el lunes 3 de este mismo mes amplio otro mes de plazo para imponer arancel de un 25% a México y Canadá y un 10% a China. Esto es un riesgo para la economía de todos los productores mexicanos, ya que según TRUMP estará vigente “Hasta que México coopere con E.E.U.U. en la lucha contra las drogas y la inmigración”.

Porque según los carteles mexicanos son los principales traficantes de fentanilo, metanfetamina y otras drogas en el mundo. Para el presidente DONALD TRUMP estos carteles tienen una alianza con el gobierno de México y ponen en peligro la seguridad nacional y la salud pública de los Estados Unidos. Dice el copetudo de TRUMP que estos tres países representan una amenaza para Estados Unidos, ya que las drogas letales como el fentanilo matan a sus ciudadanos norteamericanos, y que su deber es proteger a los estadounidenses y garantizar la seguridad de todos. ¡La pregunta es! ¿Qué tiene que ver el fentanilo con e T-MEC? ¿O la inmigración?

En este sentido: nuestras sociedades y los gobiernos de Estados Unidos y de México tienen que garantizar y compartir responsabilidades comunes. Se vive incertidumbre y preocupa que, bajo políticas de combate al terrorismo, se estén endureciendo las acciones en materia migratoria, con medidas represoras, en las que se ve al migrante como delincuente. México tiene que enviar señales claras y creíbles para la prosperidad de ambos países, con el fin de librar una cooperación bilateral para el desarrollo compartido. Hoy se tiene que construir una relación bilateral capaz de enfrentar las necesidades de México y Estados Unidos, capaz de enfrentar los desafíos que plantea el siglo XXI. México, Estados Unidos, y Canadá, saben que tarde o temprano deberán llegar a un acuerdo migratorio y del tráfico ilegal de drogas y no solo por voluntad política o por razones de buena vecindad, sino por factores económicos muy concretos y muy prácticos. Las estimaciones indican que, para el año 2050, podría haber en Estados unidos entre 400 y 550 millones de habitantes y que el tamaño de su economía superaría, en más del doble, a la Europa. Imagínese Usted amable lector; una economía de esa magnitud no solo seguirá siendo un poderosísimo imán y el mayor mercado de consumidores en el mundo, sino que requerirá evidentemente una creciente mano de obra para satisfacer la demanda del aparato productivo.

Concluyo: Hoy no se puede perder más tiempo; se debe recuperar la iniciativa en la relación con Estados Unidos, que es prioritaria para nuestro México, restañar las heridas y la frialdad que existen, y plantearse una nueva y exitosa agenda binacional y de hecho, trinacional con Canadá -, “Una agenda realista y pragmática” que beneficia los tres países.