• "No estamos quitando tiempo extra, lo que estamos haciendo es canalizar y administrar de mejor manera", dijo.
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San José del Cabo,
Baja California Sur. En entrevista exclusiva para Diario El Independiente,
Moisés Poblanno Silva dio a conocer su postura como director de la Exportadora
de Sal de Guerrero Negro en Baja California Sur (BCS), tras el anuncio de una
manifestación por parte de trabajadores sindicalizados para la tarde de este
martes 28 de enero.
El pasado fin de
semana el Sindicato Salinero expresó su inconformidad por lo que en su momento
calificaron como "un recorte a los beneficios laborales de los
trabajadores". Un problema que adjudicaron al cambio de
administración tras la nacionalización de la salinera.
Este escenario, de
acuerdo con declaraciones del líder sindical Luis Martín Perez Murrieta,
afectaba al contrato colectivo de trabajo. Cabe señalar que apenas hace menos
de un año se nacionalizó la empresa, tras años bajo la dirección de la empresa
Mitsubishi.
Al respecto,
Poblanno Silva declaró a este matutino que la solicitud de la dirección al
sindicato fue planeación para que el tiempo que se devengue sea el que se
pague. "No estamos quitando tiempo extra, lo que estamos haciendo es
canalizar y administrar de mejor manera", dijo.
Explicó que el
contrato colectivo establece que si una vez concluida su jornada laboral, son
llamados de nuevo para concluir alguna tarea, por obligación se les deben pagar
otras ocho horas adicionales, aunque no trabajen dicho tiempo. Por ello, la
dirección considera que los privilegios de "tiempo extra para todos"
lleva a un detrimento en los recursos de la empresa.
"El contrato
no nos obliga a que tengamos que definir un monto de tiempo extra para todos
los trabajadores. Si hay tiempos extra y si se les van a pagar conforme se vaya
devengando. Cada área debe definir dónde necesitan trabajadores con tiempo extra,
no atentamos contra el contrato" agregó. El funcionario se dijo en
disposición de atender al Sindicato en el momento que así lo soliciten.
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SE VENDIÓ
LA SAL
El Director de la
salinera expresó que además se logró la venta formal de más de 5 millones de
toneladas y en enero se formalizará la venta de la producción total del 2025;
el objetivo es producir casi 7 millones de toneladas.
Del 2024 se tenían
poco más de 2 millones en almacén, reconoció el director que hubo un rezago en
la comercialización de producto tras la salida de Mitsubishi, pero negó que
exista una crisis financiera en la salinera.
Aunque hay
contratos de confidencialidad con algunos clientes, reveló Poblanno que
Mitsubishi se encuentra en la lista de compradores de la exportadora. El precio
de comercialización rondó los 26 dólares por tonelada. No dejó de
considerar a la Exportadora de Sal como la productora de extracción a cielo
abierto más importante a nivel internacional.