Estamos en la recta final del presente año 2024, y en esta vertiente nos estamos preparando para recibir el próximo año 2025. Todas las mexicanas y los mexicanos nos preguntamos ¿Qué heredamos del año que se termina? ¿Conque nos quedamos? ¿Hacia dónde vamos el próximo año 2025 y que espera usted, el, yo, aquel, aquellos, nosotros y ellos? En este sentido aprovecho este especial espacio que nos brinda nuestro Diario El Independiente, esperando de todo corazón que las familias sudcalifornianas se encuentren bien y gozando de buena salud y pidiendo al gran Dios del Universo colme sus vidas de abundantes gracias y bendiciones junto a sus familias y seres queridos, así como de las personas importantes para usted, les conceda paz, salud y felices momentos el próximo año 2025. ¡Le dejo un sincero, fuerte y muy respetuoso abrazo acompañado de mis mejores deseos de bienestar en esta Navidad 2024!

¡¡Vamos resumiendo por parte lo que heredamos!! Actualmente en el terreno político el mapa actual de nuestro País es preocupante. Consideran los mexicanos que son tres los mayores desafíos que tenemos por delante; afianzar e incrementar la calidad de la Democracia y la gobernabilidad; disminuir los niveles de pobreza y desigualdad, y consolidar las reformas económicas con sentido social y equidad. El 2024 cerrara y nos dejara líderes nacionales que muestran incapacidad para ofrecer respuestas a las principales preocupaciones de los mexicanos, y como resultado, el pueblo ha perdido la Fe en la capacidad del sistema político para cumplir con sus expectativas.

¿Hacia dónde vamos los gobiernos Federal, Estatal y Municipal? ¿Van actuar de forma más rápida para garantizar a todos los ciudadanos que somos una sociedad de leyes, con procesos legales, y administrativos transparentes, y en la cual todos los ciudadanos se encuentran protegidos con instituciones modernas que den cabal respuestas a sus derechos fundamentales. Así mismo van atacar de forma más agresiva la corrupción, la aplicación anómala de las leyes. Desde luego implementaran un servicio civil que rehace el favoritismo en todos los ámbitos, constituyendo un aparato judicial menos complejo, más accesible a los ciudadanos y sobre todo, más eficiente y transparente. En este sentido cuando el Estado nos garantice, a él, a ellos, nosotros, aquel, aquellos, etc., etc., mayores mecanismos de competencia, rendición de cuentas y escrutinio público, podrán evitarse la corrupción, la apropiación privada de los bienes públicos y la impunidad.

¿Conque nos quedamos las mexicanas y los mexicanos el próximo año 2025? Nos quedamos con una ciudadanía consolidado de niveles más altos de información y educada en los valores democráticos, lo que necesariamente dará como resultado una cultura cívica, condición fundamental en el proceso de profundización de nuestra democracia, o dicho de otra manera, una ciudadanía que participe y se interese actualmente en la vida de su localidad, que comparta el sentido de identidad y pertenencia a una comunidad política, que este consciente de sus derechos y obligaciones cumpliendo con las expectativas que reclama la sociedad, ya que es la mejor garantía de que la presente democracia funciona para el bienestar de todas y todos.

Concluyo: ¡¡ Heredamos, vamos, nos quedamos!! Que este próximo 2025 procuraremos formar mejores ciudadanos, porque es una tarea pendiente en la agenda de la consolidación democrática de los gobiernos actuales. Ciudadanos que verdaderamente participen y discutan, en las circunstancias apropiadas con formación y pasión, pero también con responsabilidad y confianza para el progreso de nuestro México de hoy y de mañana.