Ante el arribo del Christian Agúndez Gómez a la alcaldía de Los Cabos, vale la pena resaltar algunos de los detalles de su discurso de toma de posesión en donde queda claro que en efecto el nuevo ayuntamiento recibe una administración completamente desordenada y en donde hay muchas dudas sobre el manejo de varios miles de millones de pesos por que necesariamente se tendrá que recurrir a acciones legales para aplicar la ley a los responsables.

Curiosamente ese mismo día, el alcalde Oscar Leggs fue captado en el aeropuerto de San José del Cabo mientras abordaba un avión comercial que lo transportó fuera de la entidad, lo que por supuesto, no es nada casual.

En este espacio reiteradas ocasiones señalamos las observaciones realizadas en su momento por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y la Auditoria Superior del Estado en donde más de tres mil millones de pesos no se solventaron tan solo durante el primer año de ejercicio administrativo, es decir el año 2022.

Christian Agúndez Gómez, señaló en su sentido primer discurso como presidente municipal, por ejemplo, que la transparencia y rendición de cuentas, será primordial en su gobierno.

“No toleraremos el enriquecimiento ilícito, la inflación descomunal de la nómina, los gastos personales a cargo del erario, los viajes sin justificación, los dispendios y lujos dentro de una administración gravemente afectada por las ocurrencias e incompetencias, los desvíos de recursos y la poca claridad en las cuentas públicas… más de 3000 millones de pesos injustificados, no se pueden tolerar”

¡Una cosa es la cordialidad política y otra la complicidad política!, exclamó con firmeza el nuevo alcalde cabeño al denunciar que la administración de Oscar Leggs, inició su administración con una base de tres mil 500 trabajadores y en el último corte de nómina se ve reflejado una plantilla de cinco mil 597 trabajadores lo cual refleja un incremento del 58.1% lo que representa un excedente 678 millones de pesos al año.

Pero no solo eso, el nuevo munícipe denunció también que la administración que ya concluyó, heredó también una deuda a proveedores y contratistas por más de 2,000 millones de pesos, dejó en estado de vulnerabilidad a más de tres mil trabajadores ya que no dejó solvencia económica suficiente para afrontar el compromiso, así como tampoco el pago de su seguro de vida.

Por si esto fuera poco, el irresponsable de Oscar Leggs a través de la dirección de obras públicas generó un retraso en el pago de las obras ejecutadas o en proceso, que se calcula en alrededor de 328 millones de pesos, así como un adeudo en el pago de becas por más de 18 millones de pesos que no se realiza desde el último bimestre de 2023 y una deuda más por 44 millones de pesos al SAT del convenio de colaboración relacionado a la Zona Federal Marítima Terrestre que administró durante estos tres años.

Y eso es solo parte de la pésima herencia de la administración de un cínico como Leggs Castro que además pretende dejar sembrados a algunos ex funcionarios y ex funcionarias que se aferran a no dejar la posición pues a pesar de este negativo balance, pretenden sin vergüenza alguna, perpetuarse en la nómina municipal.

Obviamente se tendrá que aplicar la ley y quien tenga que pagar de manera administrativa o penal estos excesos, tendrá que responder a las instancias correspondientes.

Obviamente además de la carga legal que se pueda fincar a los responsables de esta cuestionable condición en que quedó el ayuntamiento cabeño, está la repercusión política por lo que seguramente se tendrá que actuar con firmeza en el marco de la ley precisamente para que nada de lo denunciado quede impune.

Está claro que la población está a la expectativa de que la congruencia ofrecida y esta se aplique para que las cosas se hagan bien y se observe en la práctica.

Por ello se espera que ahora sí en Los Cabos las decisiones y acciones marchen bien.

Las condiciones están dadas para hacer el rescate de esa pujante región, una municipalidad que le devuelva a su comunidad la confianza de todos los sectores para alcanzar las anheladas mejores condiciones de vida.

Se espera que así sea.

Ya lo veremos.