A poco más de un mes de que concluyan las administraciones municipales en la entidad, una de las preguntas que siguen en el aire es la referente al futuro inmediato del aún alcalde de Los Cabos Oscar Leggs y sus más cercanos colaboradores… y colaboradoras.

Qué va a pasar con el futuro político y legal de un Oscar Leggs que no solo incumplió con sus compromisos ofrecidos en su campaña hace tres años, sino que además realizó un pésimo manejo de los recursos públicos como ha quedado evidenciado en las diversas auditorías.

Pero de igual manera, la pregunta aplica para sus colaboradores y colaboradoras que hoy agazapados tratan de pasar desapercibidos como si sus negligentes acciones no se hubieran registrado.

¿Habrá responsabilidad legal o solo administrativa?

¿O de plano se irán sin atender la responsabilidad que resulta de un pésimo manejo de recursos públicos?

Ya lo hemos reiterado en este este espacio.

Las áreas como Tesorería, Oficialía Mayor, Obras Públicas y por supuesto Comunicación Social, deben ser revisadas a fondo y por supuesto aplicar las responsabilidades que de acuerdo a la ley sean necesarias.

Si el rio suena es que agua lleva y vaya que suena el casi desbordado rio administrativo de la accidentada administración cabeña.

Un verdadero ejemplo de lo que no hay que hacer.

Un monumento a la negligencia administrativa.

¿Acaso habrá solo una leve llamada de atención, sanción económica o administrativa o incluso cárcel para quien así lo amerite?

Obviamente estas son parte de las preguntas que propios y extraños se hacen sobre el futuro del que fuera prepotente altanero y engreído alcalde oriundo de Migriño y que en alr3edero de cinco semanas concluye su mandato.

Obviamente y como suele ser la actitud de embaucadora del munícipe siempre fueron replicadas por los titulares de las diversas áreas mencionadas.

Se suponían casi de hierro, literalmente intocables.

Hoy están literalmente en el banquillo de los acusados y ante el juicio de una historia que dejará como lección seguramente el tener la precauc8iOn de no volver a ser víctimas de políticos embaucadores como Leggs Castro.

Falsos redentores con piel de oveja y ofrecedores de una “democracia” que solo benegfició sus respectivos bolsillos.

A poco más de un mes de que concluyan las administraciones municipales es en Los Cabos donde la atención está centrada porque es justo en esa administración donde se han evidenciado más irregularidades.

Es justo en Los Cabos donde la 4T desde sus respectivas autoridades de auditoría tendrán que ser congruentes con sus postulados y actuar en consecuencia.

¿No le parece así amable lector?

Ya veremos que sucede-