Apenas a un mes de realizado el proceso electoral que dejó una votación que reflejó el apoyo mayoritario de los ciudadanos hacia las propuestas de la coalición “Sigamos Haciendo Historia”, vale la pena resaltar los posibles efectos que ya se observan en una clase política que prepara la toma de protesta de los recién electos sin perder de vista el enorme reto de conservar la unidad.

Reto enorme de conservar la unidad porque es natural que, en los próximos tres años, no solo se tratará de cumplirle a la población con lo ofrecido en campaña, sino al mismo tiempo se intentará de hacer crecer los diferentes proyectos que tienen como objetico principal alcanzar las mejores posiciones políticas en el proceso del 2027.

Vale decir que no solo los actores políticos recientemente electos tanto en las alcaldías como en diputaciones locales y federales y senadurías buscarán participar en el próximo proceso electoral ya que incluso actores políticos que en esta ocasión no fueron nominados a las candidaturas, intentarán ya desde ahora ser considerados en las elecciones venideras.

Por ello participantes en la elección como Milena Quiroga que resultó reelecta en La Paz, ya intentan limpiar el camino de posibles escollos con la exhibición de funcionarios acusados de cometer presuntos actos de corrupción.

Está claro que lo que se haga en el arranque de las nuevas administraciones municipales marcará la dinámica de un futuro político que puede repercutir en mayor o menor aprobación de la población.

Se requiere mayor orden, control y transparencia en el uso de los recursos públicos.

Es el caso de Los Cabos, por ejemplo, que es el otro municipio demás de La Paz, donde se centrará la atención mediática y política, por lo que seguramente se tendrá que arrancar con una limpia administrativa hecha a fondo, encabezada no precisamente por el alcalde electo Christian Agúndez Gómez, sino por las diversas autoridades de contraloría y auditoría de todos los niveles.

Habrá que hacer los ajustes y correcciones necesarias desde la presidencia municipal mientras que al mismo tiempo por su parte, los organismos encargados de revisar las cuentas que arroje la mal lograda administración de Oscar Leggs apliquen las medidas necesarias de acuerdo a le ley.

Tendrán que ser estos organismos los que informen a la sociedad sobre las condiciones en que se recibe esta cuestionada alcaldía.

A partir de ahí se iniciará un nuevo ciclo administrativo que tal como en la ciudad capital, tendrá de fondo repercusiones políticas que se reflejarán en el proceso del 2027.

Sería absurdo no considerar esta posibilidad, sobre todo cuando ya desde ahora queda claro que la principal competencia será al interior de los organismos políticos que conforman la llamada Cuarta Transformación.

Por ello, así como a Milena Quiroga le urge enviar señales de que arrancará su nueva administración a partir de una “limpia” administrativa, en Los Cabos, el alcalde electo Christian Agúndez seguramente buscará ser congruente con lo que ofreció respecto a poner en claro las condiciones en que se recibe un ayuntamiento tan cuestionado para que a partir de ello se construyan mejores condici9ones de vida para los cabeños desde la alcaldía.

Por supuesto que Oscar Leggs hizo algo mal pues no es posible aceptar que un ayuntamiento que tiene los más altos niveles de ingresos tenga más problemas económicos que el resto de la entidad. Ya veremos que dicen las autoridades respectivas y cuáles son las consecuencias.

Por lo pronto a un mes de las pasadas elecciones, cada día está más claro que los futuros representantes populares que asumirán sus respectivos cargos a partir de septiembre, más los nuevos pretensos, ya vislumbran desde ahora la posibilidad de participar en el sucesorio año 2027.

Ya veremos cómo se vive ese proceso.