• Entre las principales recomendaciones por parte de las y los médicos destaca fortalecer la hidratación continua, preferentemente con agua natural o con vida suero oral que se proporciona en las unidades médicas, así como evitar la sobre exposición a los rayos del sol.
La Paz, Baja
California Sur. - Ante la ola de calor que se registra en diversas entidades de
la República Mexicana, incluida Baja California Sur (BCS), la Secretaría de
Salud (SSA) refrendó su llamado a la población en general para que aplique
medidas puntuales para evitar afectaciones como el golpe de calor y la
deshidratación, que de no ser atendidas oportunamente pueden generar
complicaciones o derivar en desenlaces fatales.
Entre
las principales recomendaciones por parte de las y los médicos destaca
fortalecer la hidratación continua, preferentemente con agua natural o con vida
suero oral que se proporciona en las unidades médicas, así como evitar la sobre
exposición a los rayos del sol durante el lapso del día en que estos se
perciben con mayor intensidad, que es de 11:00 de la mañana a 17:00 horas.
Se
sugiere evitar el ejercicio y la actividad física intensa en ese mismo horario,
en tanto que las y los adultos mayores deben permanecer en casa durante esas
horas, en sitios bien ventilados para evitar incrementos en la temperatura
corporal. Se enfatiza la importancia de no dejar a niñas, niños y ninguna
persona en general al interior de vehículos estacionados, cuya temperatura
incrementa rápidamente con el peligro de que sufra un golpe de calor o colapso.
Además,
se aconseja usar gorra o sombrero, ropa ligera y de colores claros, así como
tomar pausas de manera periódica en lugares frescos y con sombra cuando se
realicen actividades laborales a la intemperie. Usar bloqueadores de alta
protección solar, con un factor mayor de 40 o 50, para reducir el riesgo de
quemaduras en la piel. También se puede incrementar la ingesta de frutas y
verduras que tienen mayores concentraciones de agua para favorecer la
hidratación.
En
este sentido, resaltaron la necesidad de reforzar la preparación higiénica de
alimentos y su adecuada conservación, al tomar en cuenta que las altas
temperaturas propician la descomposición de alimentos y la incidencia de
enfermedades diarreicas agudas que acentúan procesos de deshidratación que
pueden ser de mayor riesgo en las pequeñas y pequeños, así como en las personas
de la tercera edad.