• Los Maestros.
Es la primera
ocasión en que la ciudadanía sudcaliforniana no brinda el reconocimiento, la
ovación y el agradecimiento que se merece el maestro.
Y no lo hace,
porque hoy por hoy, no ve en el maestro al ente accesible, al de la capacidad
de negociar, ni mucho menos al maestro interesado en educar.
Sino todo lo
contrario.
Y nada más
por eso se quedó atorado en la garganta de todos los padres de familia aquella
expresión de: “Felicidades Maestro”.
Entonces por
el contrario brotó irónicamente aquella de: “felicidades maestro por lo que hoy
estás haciendo”.
Es decir,
“Felicidades maestro por mantener en el olvido a mis hijos”.
“Felicidades
maestro por no tener la capacidad de reflexionar sobre la aceptable oferta que
se te ofrece para solucionar ese conflicto”.
Digamos,
aceptable no tanto por el porcentaje que el gobierno ofrece, sino porque el
problema data desde hace ya 20 años, y sin embargo la intención conlleva
solucionarlo en un 50 por ciento en sus inicios.
Y aquí los
padres de familia se preguntan: ¿Porque no esperaron el periodo vacacional para
hacer sus paros…?
Simplemente
porque no les dio la gana y porque algunos maestros de Baja California Sur, han
optado por tomar el camino más fácil.
Como ya lo
dije en la entrega anterior el camino de la holgazanería, de la tiricia, de la
hueva.
Y si digo
“algunos”, es porque la mayoría están de acuerdo en aceptar el ofrecimiento que
les hace el gobierno.
Por otro
lado, ya se está haciendo patente la preocupación y la indignación de los
padres de familias. Pero es algo que a los maestros no les importa, muy a pesar
de ser un asunto tan importante.
No es para
menos cuando los padres de familia saben que la ausencia de educación prologada
como es el caso, podría tener graves repercusiones en el desarrollo académico y
personal de sus hijos.
Pero es algo
que parece no importarles a los maestros, a pesar de ser un asunto tan
importante.
Y no es para
menos, cuando se estima que son alrededor de 145 mil estudiantes los que han
estado por un mes sin recibir su educación.
Lo peor de
todo es que ya está por concluir el presente ciclo escolar.
Y si las
cosas siguen igual, se corre el riesgo de que ningún alumno de primaria o
secundaria recibirá su certificado correspondiente.
Pero eso
parece que no tiene gran importancia para los maestros, aun cuando se trate de
algo tan importante.
En efecto, el
19 de julio marca el inicio de la temporada vacacional por el fin del ciclo
escolar 2023-2024, la cual durará cinco semanas antes del regreso a clases, que
será el lunes 26 de agosto.
Sin embargo,
hay que destacar que las clases en esta ocasión concluirán el 16 de julio
debido a que los profesores participarán en un taller intensivo de formación
continua.
Es por eso la
gran incertidumbre de los padres de familia, que con el inicio de un nuevo
ciclo escolar la expectativa de progreso educativo para sus niños que este año
deberán pasar a niveles superiores, como primaria, secundaria y preparatoria,
se vea empañada por la falta de clases.
Y por
supuesto que su preocupación e incertidumbre crece, al pensar que el conflicto
no se resuelva.
Y lo peor que
los afectados no son solo los alumnos, sino también la pareja de padre de
familia que ambos tienen necesidad de trabajar y quienes dejaban a sus niños en
la escuela.
Frente a esta
difícil situación, algunas familias han optado por buscar alternativas
temporales, como clases particulares.
Sin embargo,
no todas las familias están en posibilidades de hacerlo, porque no cuentan con
los recursos para ello. Pero eso parece importarles un comino a los maestros.
Por todo lo
anterior, reitero: es un grupúsculo quienes no quieren solucionar el conflicto.
Como también reitero que ahí existe un trasfondo político, porque los de hoy,
son tiempos electorales.
En síntesis,
es mas fuerte la postura recalcitrante de unos cuantos.
Y se observa
más débil la voluntad de quienes están de acuerdo con la propuesta
gubernamental.
Muy a pesar
de considerarse viable para solucionar el conflicto.
Aquí, vale
decirlo, se marca una gran diferencia, con el liderazgo en el Sindicato Estatal
de Burócratas que dirige Marco Antonio Cota Aguilar.
Porque él, en
común acuerdo con Delegados Sindicales, Seccionales y la base misma,
antepusieron la razón y la voluntad para solucionar.
Con esto,
evitaron conflictos y paros que impactan gravemente en la ciudadanía en
general.
Cosa que los
liderazgos de los maestros no han querido hacer.
En efecto,
Marco Antonio Cota Aguilar, logró una negociación contractual con firma de
minuta de acuerdo retroactiva, con beneficios para todos los trabajadores.
Lo que por
supuesto, habla bien de un verdadero líder.
Cuestión de
tiempo.