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Inicio esta columna comentando a usted; ¿Es posible predecir una inundación? En la actualidad, los modelos existentes no siempre pronostican correctamente la ocurrencia de este fenómeno. Existen dos métodos para determinar la inundación de un área dada que se basan en técnicas estadísticas con datos observados disponibles o simulaciones matemáticas por medio de computadoras. En este sentido la respuesta a esta pregunta es “POSITIVA”, ya que, si podemos prevenir o predecir inundaciones, pero el punto clave de la discusión a nivel mundial consiste en determinar que tan confiables son estos pronósticos.

Los métodos estadísticos determinan la probabilidad de que una inundación de cierta magnitud ocurra en algún lugar; su implementación requiere observaciones de lluvia (algunas veces a escala horaria) y niveles de los ríos y arroyos de muchos años. La simulación numérica de flujos de inundación consiste en la identificación matemática de flujo de agua en los arroyos y terrenos aledaños. Porque en este tipo de aproximaciones se simula el agua que fluye por una avenida extraordinaria, y para ello es prioritario y necesario conocer las características de la zona (por ejemplo, elevación del terreno, humedad del suelo) y el régimen de lluvia en la región. Tenemos que recordar que las inundaciones representan el fenómeno natural que genera el mayor número de devastaciones y pérdidas económicas a nivel mundial.

Bajo este contexto; Por su ubicación y naturaleza geográfica, nuestro País y el Estado de Baja California Sur, favorece a la presencia de ciclones tropicales extremos, como son los 26 huracanes que en promedio se producen de forma anual y que afectan las zonas costeras por ambos litorales. Así mismo, asociados a estos fenómenos, también se presentan lluvias torrenciales e intensas precipitaciones, que a su vez generan inundaciones fluviales, costeras y deslaves de tierra como los daños que genero el reciente “Huracán Norma” en el municipio de La Paz, heredando eventos de inundaciones severas en toda la ciudad de La Paz. Ahora bien; por sentido común se entiende que la presencia de un solo Ciclón Tropical es suficiente para considerar que puede haber afectaciones en todo el Estado de Baja California Sur, por lo que es necesario estar todos los ciudadanos preparados debido a la alta vulnerabilidad que existe ante fenómenos meteorológicos en nuestro País. Por otro lado; los modelos físicos que representan las trayectorias e intensidad de los Ciclones Tropicales ayudan través de los pronósticos y las alertas.

tempranas, a que la población de lugares en riesgo pueda tomar medidas de prevención con el fin de evitar la pérdida de vidas y reducir daños materiales. Porque debido a la complejidad física de los huracanes, su representación por medio de modelos dinámicos permite predecir con suficiente anticipación las características de la tormenta, su evolución temporal y posibles impactos en diferentes regiones de nuestro País. Esta información es muy útil en el desarrollo de pronósticos regionales, alertas tempranas y diagnóstico.

Concluyo: Una vía natural para hacer frente a los eventos de ciclones tropicales que concluye hasta el 30 de noviembre, es de la aplicación del principio de precaución en el que la acción preventiva se realiza sin esperar resultados concretos de la evidencia científica. Es decir; la prevención es la clave para tomar un rol decisivo durante ambos, la evaluación y el manejo del riesgo de inundaciones.