• Decepcionante labor de legisladores federales a 49 años de la conversón de territorio a Estado. • La alternancia principal enseñanza en los ya casi 50 años de Baja California Sur como Entidad Federativa. • Intrascendente como su labor legislativa el “informe” de la diputada federal panista Sonia Murillo.
A 49 años de la conversión de
territorio a Estado Libre y Soberano de Baja California Sur que se conmemoraron
este domingo 08 de octubre en sesión solemne del Congreso del Estado, valdría
la pena observar los avances en el ámbito político registrados en la entidad
durante ese lapso.
La hegemonía partidista que en
su momento mantuvo el PRI desde el arranque de la entidad federativa como tal y
hasta febrero de 1999 cuando la coalición PR-PT ganó la gubernatura y la
mayoría del Congreso del Estado, la pluralidad política ha estado presente.
Aunque muchos de los que
llegaron al poder en 1999 provenía del mismo tricolor, hoy muchos de los que
integran la clase gobernante actual también pertenecieron al PRI y algunos
otros provienen de aquella alianza PRD-PT que hoy militan en Morena.
Durante este lapso de 49 años,
el PAN también gobernó luego de los dos sexenios que encabezaron los
perredistas-petistas, dos administraciones del blanquiazul que obtuvieron la
mayoría de los votos hasta las pasadas elecciones en que Morena arrasó en las
urnas y se instaló en el poder estatal.
A casi cinco décadas del
surgimiento de la media península como parte del Pacto Federal, los sudcalifornianos
no dejan de insistir en contar con sus mejores elementos en los puestos de
elección popular, desgraciadamente no todos los que buscan esas posiciones son
necesariamente los más aptos representantes.
Actualmente, por ejemplo,
existen diputados federales morenistas como Rubén Muñoz y Alfredo Porras que
han realizado una labor definitivamente mediocre como representante en la
Cámara de Diputados y que ahora que olfatean tiempos electorales, intentan
reaparecer en el escenario mediático.
Por su parte en el PAN,
también existen legisladores federales que no han hecho adecuadamente la tarea,
sobre todo de la decepcionante diputada panista, Sonia Murillo, que presentó
este fin de semana un supuesto informe de actividades de una labor muy pobre,
que por supuesto, no ha llenado las expectativas de la ciudadanía.
Para antes de que concluya el
presente año se espera que ya esté prácticamente definidos los aspirantes a los
puestos de elección popular que estarán en la contienda electoral de junio del
año que entra y hasta ahora la ciudadanía tiene pocas opciones que realmente
garanticen resultados adecuados en las posiciones a las que aspiran llegar
mediante el voto ciudadano.
Ahora la llamada izquierda
conformada prácticamente de todos los orígenes políticos en Morena y sus
aliados esperan obtener la mayoría de los votos otra vez, aunque para muchos
esto parece que ya no serán así precisamente por lo mismo, pues la decepción
puede ser cobrada por la población a través de su sufragio.
A casi cinco décadas de la
conformación del Estado de Baja California Sur, la comunidad tendrá la opción
electoral de votar por propuestas que tendrán que superar el desgaste personal
y de diversos partidos que históricamente solo han hecho ofrecimientos llenos
de buenos deseos pero con poca o nula congruencia en la práctica.
Para cuando la entidad celebre
su primer cincuentenario de ser Entidad Federativa, es decir en octubre del
próximo año, ya se habrán realizado las elecciones en donde además de la nueva
presidenta de México se habrá decidido sobre senadores, diputados federales y
locales, así como alcaldes que integran la median península y para entonces
veremos que tan efectivas resultaron las campañas y por supuesto el voto de la
ciudadanía.
Veremos cómo inicia la segunda
etapa del gobierno estatal, el arranque de una nueva administración federal y
por supuesto cómo se celebran los primeros 50 años de vida como Estado Libre y
Soberano de la bella Baja California Sur en donde la alternancia en el poder ha
sido una de sus principales lecciones políticas.
Ya veremos.