• Hasta el 80 % de los menores en edad escolar consumen bebidas azucaradas en gran proporción y menos de la mitad come la ración adecuada de verduras, alertó la especialista Angélica León Téllez-Girón.
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Estado de México. - Hasta el
80 % de los menores en edad escolar consumen bebidas azucaradas en
gran proporción y menos de la mitad come la ración adecuada de verduras, alertó
Angélica León Téllez-Girón, jefa de la División de Nutriología Clínica del
Hospital General “Dr. Manuel Gea González” de la Secretaría de
Salud.
Por lo anterior hizo un
llamado a las familias a no incluir alimentos ultraprocesados en el lunch
escolar, ya que su ingesta aumenta el sobrepeso, la obesidad y otras enfermedades
como la diabetes.
“El refrigerio escolar preparado con
alimentos naturales y nutritivos contribuye a elevar el nivel de atención
durante las horas de clase. En cambio, los productos ultraprocesados como
cereales de caja y galletas están asociados con hiperactividad.”
“Los productos ultraprocesados no
deben incluirse en el refrigerio escolar, ya que solo contienen las llamadas
calorías vacías que no aportan las vitaminas y los minerales presentes en
verduras, frutas y cereales integrales”, señaló la especialista.”
Añadió que la alimentación
de los niños se debe estructurar en cinco tiempos: desayuno, comida, cena o
merienda y dos colaciones, lo que incluye el refrigerio,
coloquialmente conocido como lunch para el receso escolar.
“Del total de nutrientes que el
organismo necesita a lo largo del día, entre 20 y 25% los debe proveer el
desayuno; 30% la comida; de 20 a 25% la cena y, el resto, las colaciones”,
explicó.
LA “DIETA DE
LA MILPA”
Ante este panorama, la
Secretaría de Salud recomendó utilizar la llamada “Dieta de la Milpa", un
modelo basado en la cultura y características regionales del país que es
saludable para las personas y amigable con el medio ambiente.
“La Dieta de la Milpa promueve el
consumo diario de verduras y hortalizas, en la mayor cantidad posible en todas
las comidas como son calabaza, nopales, quelites, verdolagas, romeritos,
huauzontle, jitomate, tomate, pimiento, chayote, berros, huitlacoche y hongos,
entre otros. Seguida de las frutas completas sin azúcar adicional, así como los
cereales integrales”.
El uso de los aceites
cardioprotectores e insaturados, semillas, leguminosas, lácteos, endulzantes y
proteína animal, se debe usar en menor cantidad.
“Se sugiere aprovechar los alimentos
regionales y de temporada para elaborar recetas y platillos, esto los hace más
nutritivos y económicos pues de preferencia se recomienda adquirirlos en los
mercados locales”, señaló la dependencia.