Han transcurrido casi 15 años y la desigual lucha del emblemático hotel Los Arcos no ha sido lo suficientemente fuerte para volver a ser lo que fue.

Sin embargo, estoico, ha soportado no solo los embates de la naturaleza, sino el robo, el vandalismo, el saqueo, la destrucción y hasta los incendios.

En efecto, desde aquel fatídico 21 de noviembre de 2008, cuando las venganzas políticas contra la familia Coppola provocaran que las banderas se tiñeran rojinegras, dio inicio el calvario.

Un calvario infernal, ya no tanto para los trabajadores o el propietario, sino para el icónico hotel Los Arcos.

Sí, porque a partir de entonces se transformó en lo que hoy es: un muladar, un basurero, y una tristeza para muchos que se enorgullecían con su belleza, pulcritud y presencia.

Y a partir de allí, empezó el caos e iniciaron las denuncias, los amparos, los jaloneos, los gritos, los desacuerdos.

Ya no se diga los desastres, las desgracias, las calamidades y las desdichas, ocasionadas por los incendios.

En efecto, dos extrañas conflagraciones cuyas investigaciones allí quedan, en los archivos del olvido.

El primer incendio, ocurrido el 27 de agosto de 2016, el segundo, el más reciente, el 19 de marzo de 2023.

Ambos, sin aun saber las causas.

Ambos, por supuesto, insertos en tenebrosos sospechosísimos, en sigilosas dudas, y los oscuros misterios.

Veamos.

Hace ocho años, el conflicto laboral del Hotel Los Arcos parecía estar cerca de llegar a su fin.

Lo anterior, lo había dado a conocer Alberto Rentería Santana, dirigente del Sindicato de Gastronómicos de Baja California Sur.

En ese entonces precisó que si bien se ha dado un avance sustancial en el caso, el pago parcial se vislumbra como “una forma amañada” de abordar el conflicto por parte de los Coppola, pues aunque reconocen la deuda no consideran a 70 trabajadores.

Y esto se había dado luego de que la familia Coppola realizara el pago de salarios caídos a 9 de los 79 trabajadores que iniciaron la huelga, con una cantidad aproximada de 7 millones de pesos.

En síntesis hoy por hoy, y tras 15 años de denuncias, amparos y lucha por parte del Hotel Los Arcos el Tribunal Colegiado ha dictaminado, que se deberán de pagar 140 millones de pesos en favor de los 79 sindicalizados, esto debido a que la empresa había venido presentando acciones en contra de una resolución anterior.

Ante dicho dictamen, se espera que el cuerpo jurídico que representa a la familia Coppola responda a la sentencia en donde se les obliga a pagar la cantidad antes mencionada.

Claro, en tanto el sindicato y los trabajadores siguen teniendo en garantía propiedades como son el mismo Hotel Los Arcos y las cabañas adyacentes.

Pero esa vez, Rentería Santana sospechó que se trata de una estrategia legal para que el Sindicato de Gastronómicos se inconforme con el pago y los dueños del hotel se amparen de nuevo.

De esta manera, se extendería el juicio.

Sin embargo, dijo que el hecho de que hayan realizado una primera entrega “acorta el camino”, pues ahora el caso sólo se trata de definir la cantidad de dinero que recibirán los trabajadores.

Por su parte, Oscar Martínez Burgos, secretario del Sindicato de Gastronómicos, precisó que cada trabajador recibiría alrededor de 700,000 pesos por concepto de salarios, canasta básica, fondo de ahorro, premios de puntualidad y asistencia, aguinaldo, vacaciones y propinas.

Cabe recordar que un tribunal colegiado en materia laboral exhortó a la Junta de Conciliación y Arbitraje de Baja California Sur que obligue a Los Arcos a saldar adeudos con los 79 trabajadores.

En esa ocasión el líder del sindicato dijo sentirse satisfecho pues observa que el conflicto está por terminar, ya que se encuentra en su etapa más sencilla, dijo, que es corroborar la existencia del resto de los trabajadores, lo cual se hará con talones de cheques, informes del seguro social y con la presencia de cada uno de ellos

Pero por sobre todo esto, lo importante es que el hoy gobernador de Baja California Sur, Víctor Manuel Castro Cosío, se comprometió con las y los trabajadores del Hotel Los Arcos para ayudarlos con toda la fuerza del gobierno del estado.

Lo anterior fue apenas unos días antes de que Víctor Castro Cosío, asumiera la gubernatura del estado.

Esa vez, el virtual mandatario, tras afirmar que se interesa en la creación de fuentes de empleo, se comprometió en procurar que se haga justicia laboral y además se abra el hotel ya que es una importante fuente de trabajo.

Luego entonces, el hecho de que Víctor Castro Cosío haya antepuesto su voluntad en este asunto nos deja abierta la esperanza de que este conflicto está a punto de terminar.

Y para bien de todos ojalá y así sea.

Cuestión de tiempo.