• El titular la dirección de transporte en BCS mencionó que la Ley de Transporte Estatal contempla la diferenciación de un servicio de primera clase y una de segunda, con el objetivo de generar una sana competencia en el sector.
La Paz, Baja California Sur.-
En fechas recientes, el Ayuntamiento de La Paz envió al Congreso de Baja
California Sur (BCS) el proyecto de fideicomiso para renovar el sistema de
transporte local, mismo que “se bajó” del orden del día para someterlo a un
análisis. En este sentido, el director de transporte estatal, Martín Guadalupe
Salinas Ceseña, señaló que la propuesta pretende fortalecer y mejorar la
infraestructura, y no el “privatizar” el servicio.
Mencionó que la alcaldesa
Milena Paola Quiroga Romero, busca “inyectar recursos” al sector transportista
para que éstos circulen con unidades modernas, que sean atractivas para la
ciudadanía y el turismo que visita la capital del estado.
Además, agregó, mediante la
adquisición de las nuevas unidades se contempla mejorar el servicio colectivo
al implementar mejoras en el servicio que los concesionarios prestan en la
ciudad; no obstante dijo, a pesar que el número de camiones es bajo, “por algo
hay que empezar”.
“La ventaja que tienen es que,
en un momento dado, esto pudiera caminar y trascender en la cantidad de
unidades que hoy circulan por la ciudad; tenemos alrededor de 200 unidades de
transporte colectivo y urbano. Será el usuario el trascienda en el uso del
servicio. Con algo se tiene que empezar; algunos concesionarios de entren en
este esquema será por decisión propia y se tiene que respetar”.
En este sentido, el
funcionario declaró que, de acuerdo a la Ley de Transporte en el Estado, ésta
permite un diferenciador del servicio colectivo, como la primera y segunda
clase, las cuales, deben ser consideradas por la administración paceña para que
establezca las rutas y tarifas de cobro permitidas y así, evitar una competencia
desleal.
Asimismo, Salinas Ceseña,
expresó que aún cuando el gremio transportista presente sus inconformidades,
deberán acatar las indicaciones que el Ayuntamiento establezca una vez que se
analice el proyecto del fideicomiso.
“Entendemos la preocupación de
los permisionarios que están de acuerdo con la ruta que se lleva. Ellos tienen
deseos ellos de modernizarse y traen una inquietud; sus argumentos, se derivan
por la condición de las unidades y el esquema de la tarifa vigente que no les
permite dar el paso siguiente, entonces, esa es la parte que efectivamente le
toca al propio Ayuntamiento dictaminar y valorar el alza de las tarifas”.
Por su parte, los
concesionarios expresaron en reiteradas ocasiones que la iniciativa que propone
la primera edil “muestra buenas intenciones”; sin embargo, de fondo, afirman,
pretende dañar la economía de los conductores del volante, quienes por varios
años solicitaron el incremento de la tarifa sin que esto pueda hacerse
realidad.