La Paz, Baja California Sur.- “Tenemos que sumar esfuerzos para proteger lo que queda del estero de San José del Cabo”, afirmó el gobernador del estado, Víctor Manuel Castro Cosío.

Destacó que esta reserva ecológica no solamente tiene una raíz histórica para las familias josefinas, sino que fue además la principal fuente de abastecimiento de agua.

Señaló que no es solamente de un descuido o de abandono, y que en cualquier momento se pueden registrar incendios por los palmares resecos o huertas cercanas, ya sea provocado o por un descuido.

Mencionó que esta área natural protegida está en manos de la Semarnat y la Profepa, pero el compromiso de su gobierno es hacer lo que sea necesario para su protección, aunque no precisó acciones.

De acuerdo con Pronatura Noroeste desde el 2009 el sitio aparece en la Lista RAMSAR que cataloga los humedales de importancia estratégica para el planeta.

Se tiene registro de 217 especies de aves acuáticas, de las cuales 97 son migratorias y 19 están consideradas en alguna categoría de riesgo.

La organización destaca que este humedal es la última estación de descanso para las aves acuáticas y playeras que cruzan el mar desde la península de Baja California con rumbo al sur de México, Centroamérica y Sudamérica.