Inicio esta columna comentando a Usted; el pasado 4 de enero se conmemoro el día del “Periodista”, en memoria de MANUEL CABALLERO, padre del Arte de Reportear ¡¡no se celebró!!, mucho menos, feliz día del Periodista!!! Fue un día que todo nuestro gremio hizo oración pidiendo a Dios que nunca jamás nos asesinen a un compañero más, y que el nivel de violencia extrema con tanta agresión cesen de inmediato este año 2023. Nuestros periodistas merecen todo el respeto porque son parte de nuestras estructuras en la comunidad, siempre han contribuido decisivamente a transformarlas. Los periodistas no somos testigos indiferentes del acontecer diario, son depositarios y autor de la conciencia colectiva y por ende, gestor efectivo de lo que habrá de suceder mañana. Es nuestro deber orientar al ciudadano es tan imperioso para el periodista como lo es para el “Estado respetar La LIBERTAD DE EXPRESION”.

Bajo este contexto: La prense ha de armonizar las tradiciones de la democracia individualista con las exigencias de la sociedad plural, si no puede renunciar a la dosis de subjetivismo que implica toda opinión, al mismo tiempo debe buscar la explicación objetiva de las cosas que facilita la comprensión antes que la toma de partido. Ahora bien: entre la didáctica y el juicio, entre la noticia y el razonamiento, entre el hecho y sus antecedentes, se halla el camino profesionalmente difícil y moralmente comprometido “Del Periodista de nuestro tiempo”.

Compañeros periodistas: Hoy nuestro festejo es que sigamos adelante con la Revolución Mexicana, pero ni siquiera por táctica política dejemos que no haya critica; la crítica es indispensable del espíritu humano y es necesaria sobre todo en la vida política. Hagamos crítica para hacer las cosas mejor. No nos apartemos ni siquiera de la expresión, es reafirmar el contenido y la forma también, es ir más hondo a las raíces de sus postulados y tenemos que afirmar que la revolución mexicana debe de iniciar una nueva etapa con auténtica autocritica para que los beneficios lleguen a todos los sectores de la sociedad.

Los periodistas han consagrado siempre en honrar la memoria de BENITO JUAREZ. El Pueblo y el Gobierno han asumido la decisión de seguir el ejemplo como lo hicieron nuestros antepasados que condujeron su causa a la gran victoria. JUAREZ no fue un hombre aislado, sino la cúspide de una gran pirámide formada por una generación de patriotas que no midieron sacrificios para salvar a la

República, “El Periodista fue entonces un arma intelectual privilegiada contra los invasores de nuestra soberanía”.

Ahora bien; MANUEL CABALLERO Y FRANCISCO ZARCO, no son únicamente símbolos de la libertad de expresión: también lo son de compromisos ideológicos en integridad patriótica. El periodista liberal tuvo dimensión histórica porque pugno por el cambio social en contra de las minorías dominantes, además fueron vigorosos defensores de nuestra soberanía.

Concluyo: compañeros periodistas al conmemorar un año más, formulo votos porque el periodista cumpla con honor y eficacia la parte que le corresponde en la gran tarea Nacional que tiene ante sí esta generación de mexicanos.