San José del Cabo, Baja California Sur. En punto de las 8:00 horas de la mañana salieron desde la Glorieta Fonatur al menos 300 trabajadores de la educación, con destino al Palacio Municipal, en San José del Cabo, Los Cabos. Con consignas como "Ni un paso atrás", "Maestro luchando también está enseñando" y "Sueldo de profesor para el gobernador" fueron avanzando sobre las vialidades.

El objetivo, de nueva cuenta, es hacer el llamado a autoridades estatales y federales para ofrecer basificación y no homologación a los trabajadores compensados, además calidad en servicios de salud, pago de quinquenios, entre otros beneficios para los sindicalizados. 

En la Plaza Antonio Mijares los esperaba otro grupo de trabajadores, quienes desde hace varios días han mantenido el "plantón" durante las horas que normalmente corresponden a su jornada laboral, mismos que recibieron a los marchistas con aplausos. Minutos después ingresaron al recinto gubernamental en donde pidieron la solidarización de trabajadores del Ayuntamiento, pues comentaron que el beneficio en servicio de salud también es para ellos como trabajadores del Estado. 

 Pese a que en cada reunión los acuerdos se van actualizando, la proyección de un regreso a clases sigue siendo lejana y por el contrario, han pedido los maestros el apoyo de padres y madres de familia para esta lucha social.

"Aún no tenemos respuesta, estamos esperando que nuestro Secretario de la Sección 3 nos comunique los acuerdos que hicieron en Ciudad de México, para ver si pueden mejorar lo que se dijo en la negociación este 5 de noviembre... Si no hay respuesta favorable haremos otra acción como la de hoy, donde salgamos a la calle y seamos vistos por la sociedad y que se den cuenta que la respuesta del Secretario de Gobernación no es la que esperamos. Todavía no hay fecha de regreso a clases, el magisterio para regresar a clases deberíamos tener bases", expresó Luis Miguel Ramírez Rivera, líder del Movimiento Sindical Cabeño.

Hasta el cierre de esta edición, de manera extraoficial se contempla el bloqueo de accesos al Aeropuerto Internacional de Los Cabos, aunque fue confirmado por parte de ningún dirigente.