Partidos políticos y diversos sectores de la población aprueban trabajo para establecer nueva Ley Estatal Electoral. Se busca total certeza a ciudadanos, instituciones electorales y organizaciones partidistas de que habrá piso parejo en las elecciones locales que inician a finales del año entrante. Por lo pronto partidos políticos ya se organizan para llevar a cabo procesos internos con miras al 2024.
Uno de los temas que serán de gran trascendencia dentro del trabajo que se espera realice el Congreso del Estado será lo referente a la nueva Ley Estatal Electoral precisamente por el impacto que tendrá en todos los sectores de la población sudcaliforniana.
Está claro que esta nueva legislación electoral debe tener como premisa el mejorar la certeza en los procesos electorales y por supuesto en los resultados que se registren en las elecciones respectivas.
En Baja california Sur tendremos elecciones en el año 2024 pues además de la elección del presidente de México, las senadurías y diputaciones federales, también estaremos renovando el Congreso estatal, así como las cinco alcaldías que conforman la entidad.
De ahí que se requiera una nueva ley electoral que se adapte a las actuales circunstancias políticas y sociales que se registran en la entidad sobre todo porque los núcleos poblacionales se han modificado con el paso del tiempo.
Ese es justamente el enorme reto de los actuales diputados locales que ya trabajan en establecer un documento legal-electoral que permita tanto al Instituto Estatal Electoral (IEE) como al mismo Tribunal Estatal Electoral (TEE) contar con herramientas jurídicas que le brinden a actores y partidos políticos, así como a la sociedad en general que no existan dudas a la hora de renovar los órganos de representación popular.
Por ello es importante la labor que ya se realiza desde ahora en el poder legislativo y en donde a cuatro semanas de que se publicó la convocatoria para la reforma electoral en Baja California Sur, la comisión especial nombrada para esta tarea ha tomado en cuenta con reuniones de socialización de la misma con todas las autoridades de los cinco municipios.
Alcaldesas, el alcalde de Los Cabos, delegados municipales, responsables de los campus de la UABCS en Los Cabos, Ciudad Insurgentes, Loreto y Guerrero Negro, autoridades del IEE, Tribunal Estatal Electoral, INE, Consejo Coordinador Empresarial de Los Cabos, entre otras instituciones públicas e incluso privadas a nivel estatal han externado sus puntos de vista respecto a esta importante reforma.
Aún existe tiempo para que esta reforma se aplique, pero ya desde ahora los diputados trabajan en este tema que fue uno de los asuntos que quedó pendientes en la legislatura anterior (XV) que aplicó más su tiempo en temas políticos y partidista que en los legislativos.
Hasta ahora existe un buen clima político para realizar esta nueva ley estatal electoral sobre todo en los partidos políticos que, dicho sea de paso, también trabajan ya en los sus respectivos procesos internos para definir posibles abanderados, que dentro de cuatro meses, cuando inicie el 2023, prácticamente de manera inmediata la actividad política partidista se incrementará.
Al respecto la presidenta de la Comisión Especial, diputada Marbella González Díaz dijo que son los institutos políticos actores relevantes en los procesos electorales, por lo que les hizo un llamado a presentar propuestas que fortalezcan la normatividad electoral “y con ello darle total certeza a ciudadanos, instituciones electorales y organizaciones partidistas de que habrá piso parejo en las elecciones locales que inician a finales del año entrante”.
El resto de las integrantes de la Comisión Especial, diputadas Guadalupe Vázquez Jacinto y María Luisa González Ojeda, así como el diputado Christian Agendes Gómez, coincidieron en esta lógica s para reformar la normatividad electoral, convocatoria a la que se sumaron el presidente del Congreso, diputado José María Avilés Castro y la representante de Acción Nacional, Blanca Belia Márquez.
Certeza, transparencia y por supuesto “piso parejo” es justamente lo que debe prevalecer en una nueva ley estatal electoral que le brinde a la ciudadanía la mayor confianza posible en que su voluntad expresada en el voto sea verdaderamente respetada.
Ya veremos hasta dónde trasciende esta labor de la décimo sexta (XVI) legislatura.
Ya veremos.