Sin embargo, el gobernador le pidió que si sabe “dónde está chorreando sangre”, que lo denuncie y no se quede solamente en secreto de confesión o declaraciones en su templo.
La Paz, Baja California Sur.- El gobernador del estado, Víctor Manuel Castro Cosío afirmó que ya no entrará en polémica con el obispo de La Paz, Miguel Ángel Alba Díaz.
Tras el reclamo del líder de la iglesia católica a los gobernantes por la inseguridad y el señalamiento de que las autoridades supieron ganarse al pueblo, pero no supieron gobernar, el mandatario estatal expresó su respeto al pontífice.
Sostuvo que por más jerarquía eclesiástica que tenga, él ya cerró el capítulo.
“Yo si cierro capítulos y se lo digo claramente al señor obispo. Él me había mandado una carta privada y la hizo pública y yo dije: de qué se trata. Quieren que entre en ese debate, pero no. Respeto todas las religiones y los dichos de la gente”, externó.
Sin embargo, aun cuando insistió en que ya no entraría en polémica con el religioso, el mandatario externó que a lo mejor sí tiene información y señaló “que vaya y lo denuncie y no nada más haga declaraciones dentro de su templo.
Señaló que si sabe dónde está chorreando sangre, que lo denuncie y que no se quede solamente en secreto de confesión.