Para esta semana está programada la conclusión del actual periodo ordinario de sesiones del Congreso del Estado por lo que el balance del trabajo legislativo hasta ahora está dentro de lo esperado.

El debate entre los legisladores a pesar de las diferencias de fondo que tienen precisamente por la representación partidista que ostentan, hasta ahora ha permitido realizar el trabajo legislativo sin mayores problemas.

Desde el espinoso asunto de la legalización del aborto, hasta lo que se refiere al tema electoral, la inclusión de la Comunidad LGBT al establecer junio como el mes dedicado a este sector de la población, y la supervisión de manejo adecuado de los recursos públicos, han sido temas que se han asumido con la responsabilidad social que ello implica.

Se espera por ello que luego de la conclusión del periodo ordinario de sesiones este jueves 30 de junio, se perfile el trabajo de mayor impacto, que entre otros, está la actualización de la ley estatal electoral que tendrá como principal decisión lo referente a la modificación de los distritos locales electorales.

También será necesario que se tomen medidas respecto a la movilidad en la entidad que es ya un problema ante las nuevas necesidades en este tema que tienen la entidad en general, sobre todo en los municipios de La Paz y Los Cabos.

Además, lo que no se puede perder de vista es que para el mes de octubre se esperan ya resultados concretos sobre la auditoría que ya se realiza a la administración de los recursos financieros en la anterior legislatura lo que por supuesto puede generar responsabilidad a exfuncionarios y exlegisladores que tuvieron en sus manos la disposición del dinero del poder legislativo.

Está claro también, por supuesto, que desde el congreso del estado se perfilarán intenciones políticas pues más de cuatro diputados aspiran a llegar a las alcaldías de sus respectivos distritos electorales, algunos aspiran a las diputaciones federales y no le extrañe que incluso exista quien desde la actual legislatura aspire a ser parte del Senado de la República.

Eso le dará una nueva dinámica al poder legislativo local en donde las confrontaciones naturales pueden ser aún más álgidas no solo entre partidos políticos antagónicos, sino incluso entre integrantes de una misma fracción parlamentaria.

Así que ante la conclusión del actual periodo ordinario de sesiones el balance es hasta ahora favorable, definitivamente mejor que lo hecho a estas alturas que lo que se hizo en el Congreso anterior.

Los diputados se perfilan hacia el segundo año legislativo que inicia en septiembre próximo y con ello se acorta el tiempo para trabajar en la actualización y aplicación de nuevas leyes al tiempo que la ciudadanía se prepara para el nuevo proceso electoral del 2024 cuya organización arrancará desde enero del 2023, es decir dentro de poco más de seis meses.

Desde luego que la población está al pendiente del trabajo de sus diputados y representantes populares en general.

Nadie debe perder de vista este detalle.