Tras el anuncio de que las licitaciones de camionetas Suburban a subastar quedó desierta por falta de postores, el gobernador del estado no desestimó usarlas “para alguna situación de transportación”.
La Paz, Baja California Sur. Vamos a ver qué hacer, expresó el gobernador del estado Víctor Manuel Castro Cosío al ser cuestionado sobre el destino que le dará al lote de más de una decena de camionetas Suburban de lujo y con blindaje que no pudo subastar por falta de ofertas “fueron muy bajas” dijo para luego afirmar que podrían ser usadas para la transportación de personal en giras.
“Se tuvo que declarar desierto, la vamos a tener que licitar. Se presentó solo un postor y dijimos no, así no. Solo hubo un comprador, y otros que ofrecían comprarlas todas. Estamos viendo cómo licitarlas al precio del libro azul se venderán. Es necesario sacarlas. Tampoco las vamos a tirar. No vamos a malbaratarlas mejor las usamos, a última hora nos van a redituar más. Que estén ahí para cuando vayan a comisión varias personas y, poco a poco, irlas vendiendo, pero a precio justo razonable”, se expresó cuestionado sobre el destino de los vehículos.
El gobernador luego reviró que, si se usan, las Suburbans blindadas no entregarán para fines particulares.
¿Entonces van a hacer uso de ellas señor gobernador?
“No, las vamos a mantener fuera de servicio, se acabó eso al rato vamos a andar otra vez que la gente pide Suburbans, privilegios ya no”.
A su llegada a la administración estatal, el gobernador Víctor Castro dijo que se desharía de las camionetas Suburban de lujo y blindadas que compró su antecesor Carlos Mendoza Davis. Sin embargo, al revisar la licitación de su subasta trascendió que algunas unidades tienen más de diez años de uso intensivo transportando funcionarios estatales a lo largo de la media península.
De acuerdo a la convocatoria 001 emitida por la Secretaría de Finanzas del Gobierno del Estado de Baja California Sur, de las 17 camionetas a subastar, 16 fueron adquiridas no en el gobierno de Carlos Mendoza Davis, sino en las administraciones de Narciso Agúndez Montaño (2005-2011) y Marcos Covarrubias Villaseñor (2011-2015).
En ese lapso se adquirieron 16 camionetas, de las cuales, cinco fueron modificadas con blindaje.
De las 16 que adquirieron el par de ex gobernadores, fueron una comprada en el sexenio de Agúndez Montaño (2010), en el corto periodo de Covarrubias Villaseñor que duró solo cuatro años (siete en 2011; 1 en 2012, con blindaje tipo V; otras dos “sencillas” en 2013; otra en 2014 y cuatro más hacia el cierre de su gobierno en 2015 dos con blindaje V y dos B.6).
Los blindajes tipo “V” resisten disparos que alcanzan los 910 metros por segundo. El peso del blindaje nivel 5 + ronda entre los 1.250 kg y 1400, por lo que está indicado para camionetas y vehículos con gran potencia en sus motores.
Los blindajes tipo “B6” son para protección a personalidades bajo alto riesgo de atentado y secuestro. Resiste balas diseñadas específicamente para penetrar blindajes, disparadas por armas caras y difíciles de adquirir en el mercado negro, que usualmente son empleadas por grupos elite de la delincuencia organizada.