San José del Cabo, Baja California Sur. El pasado martes 21 de  junio, la diputada y presidenta de la mesa directiva del Congreso de Baja California Sur, Gabriela Montoya presentó una iniciativa con proyecto decreto para crear la Ley de Manejo Integral de Residuos Sólidos.

Uno de sus principales objetivos es establecer las atribuciones de las dependencias y entidades competentes de la Administración Pública del Estado y de sus Ayuntamientos, así como los mecanismos de coordinación entre dichas autoridades con el gobierno Federal, el de otras entidades federativas o de sus municipios, de conformidad con la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos,  así como la construcción y operación de centros de acopio, estaciones de transferencia, plantas de selección y tratamiento y rellenos sanitarios.

En ese sentido, aclaró Montoya que no se busca poner en conflicto al municipio "Necesitamos que todo lo que se tenga que aprobar sea por  las normas que tiene que pasar y permisos para que las instancias verifiquen se va a cuidar al medio ambiente, eso debemos cuidar, cuando se vayan a hacer los proyectos tener los ojos bien abiertos... No podemos detenernos por cómo le van a hacer con el presupuesto si tienen otras problemáticas a veces   importantes, pero es una cuestión de salud pública, todo lo que tenga que ver con el medio ambiente tenemos que respaldarlo, cuando nosotros revisemos los presupuestos de cada municipio se va a ser muy cuidadosos para que vengan los recursos etiquetados para poder echar a andar la nueva ley" dijo.

Así mismo, señaló se buscará con los homólogos del Congreso de la Unión el respaldo para avanzar con rellenos sanitarios, educación ambiental  y en el caso de Los Cabos, la regularización de predios para urbanizar las llamadas invasiones que representan también un gran problema al no contar con servicio de recolección.

 Los residuos sólidos urbanos, conceptualiza la Ley, son los generados en las casas habitación, que resultan de la eliminación de los materiales que utilizan en sus actividades domésticas, de los productos que consumen y de sus envases, embalajes o empaques; lo son también, los residuos que provienen de cualquier otra actividad dentro de establecimientos o en la vía pública que genere residuos con características domiciliarias, y los resultantes de la limpieza de las vías y lugares públicos.