• Google homenajeará al pintor con más de cien imágenes digitalizadas y colecciones online, además de las historias detrás de sus cuadros más famosos
Un patriarca del arte
latinoamericano y uno de los más reconocidos por su obra cumple noventa años.
Casi tan célebre como el Nobel de Literatura Gabriel García Márquez, la
cantante Shakira y el narcotraficante Pablo Escobar (que mandó a destruir la
escultura Pájaro en Medellín), el colombiano Fernando Botero (Medellín, 19 de abril
de 1932) será agasajado en su país natal, en Italia e incluso por ese gran
continente digital llamado Google, que pondrá a disposición de los usuarios en
su plataforma de arte y cultura propuestas interactivas y una galería online
para conocer más sobre la obra e historia de uno de los artistas vivos más
admirados en el mundo.
Aunque Google no lo dice, parte
de la fama internacional de Botero debe atribuirse a la escritora y crítica de
arte argentino-colombiana Marta Traba, que revolucionó el pujante ámbito
artístico de Colombia con su presencia en la televisión, la prensa y la
universidad.
Según Traba, la obra de Botero
“jamás será una impostura, porque nace de los más sinceros esfuerzos por
existir como creación propia e irá definiendo valores cada vez más firmes,
porque la tenacidad, unida al talento, no puede nunca desembocar en el vacío”.
Aunque algunos artistas y críticos -incluida la misma Traba a inicios de la
década de 1980, antes de su prematura muerte- pusieron en duda esa afirmación
de 1958, ya había nacido un nuevo estilo artístico: el “boterismo”.
Mientras los museos públicos
colombianos abrirán sus puertas para que los visitantes conozcan el legado de
Botero, Google se prende a la “boteromanía” y homenajea al artista que pinta,
dibuja y esculpe voluminosas figuras humanas y animales con más de cien
imágenes digitalizadas y colecciones online para ver en detalle y conocer las
historias detrás de sus cuadros más famosos.
Desde la computadora en
artsandculture.google.com o desde el celular, con Android o iOS, será posible
informarse sobre las técnicas del pintor y sus motivaciones a la hora de pintar
retratos de personajes latinoamericanos y españoles, bodegones, instrumentos
musicales, mujeres voluptuosas y escenas de violencia política. “Lo he dicho
muchas veces: no he pintado una gorda en mi vida -declaró sobre sus figuras-.
He expresado el volumen, he buscado darle protagonismo al volumen, hacerlo más
plástico, más monumental, como si fuera casi comida, arte comestible. El arte
debe ser sensual: en ese sentido lo digo”.