San José del Cabo, Baja California Sur. En entrevista con Diario El Independiente,  el Comandante Juan Carbajal, titular del Cuerpo de Bomberos de Cabo San Lucas, habló sobre la movilización del pasado viernes 4 de marzo en Santiago, durante el incendio. También señaló las dificultades para atender emergencias y situaciones de riesgo en la zona norte del municipio y la entidad.

Explicó que, en aquel día pese a que ya había conocimiento de que un siniestro había iniciado en la comunidad de Santiago, no fue hasta las 15:30 horas que recibieron la petición oficial de ir a apoyar como cuerpo de emergencia; a los dos camiones que fueron enviados inmediatamente les tomó una hora y veinte minutos llegar a la zona afectada; además de este factor, otra razón que influyó en alargar el tiempo de respuesta fue la poca accesibilidad.

"Lamentablemente el viento en un principio hizo que el fuego se extendiera, hay una zona pantanosa en el palmar que evita que los camiones puedan entrar, son terrenos fangosos, evita la movilidad de las mangueras... La atención al incendio debe darse con prontitud, el tipo de incendio de palma es muy rápido, las palmas aun cuando están verdes tiene aceite que las hace flamables, lo mismo con los carrizos", dijo.

Añadió que es necesario que en territorios como Miraflores, Buenavista y claro, Santiago, haya estaciones de bomberos, pues los minutos pueden ser vitales para que cualquier zona de desastres se convierta en cenizas. Anteriormente, se contaba con una subestación en Buenavista, sin embargo ya no opera más.

"Si hay una necesidad de tener más estaciones de bomberos, más en esos puntos, más porque han crecido, a pesar de que son comunidades de alguna manera rurales, se ve que han venido desarrollándose, hay más gente viviendo en esos lugares, es necesaria una estación intermedia que acorte el tiempo de respuesta", comentó Carbajal.

Expresó que siempre ha existido una petición hacia las autoridades para realizar caminos intermedios o guardarrayas en zonas como el Estero de San José del Cabo, o el caso de los palmares, que tengan la función de "cortar" el fuego, sin embargo, se ha hecho caso omiso. "Cada vez que un incendio de esta naturaleza, vuelven a ser las mismas sugerencias, se vuelve a plantear una estrategia, pero lamentablemente queda todo al calor de lo ocurrido y mientras se enfrían las cenizas del incidente , se enfría el aprendizaje que nos da cada incendio, su hay acciones que se podían hacer para evitar que se repita", concluyó.