La Paz, Baja California Sur. Activistas de la capital del país se manifestaron de igual manera ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ubicada en Ciudad de México. Pidieron detener proyectos que consideran nocivos al ambiente como los proyectos para construir muelles de cruceros en Pichilingue en La Paz, Baja California Sur y Cozumel, en Quintana Roo.

Con disfraces de tiburones, cangrejo y pescados el contingente ofreció una rueda de prensa cuestionaron las prioridades de autoridades ambientales de impulsar el turismo de cruceros, al que llamaron un “falso desarrollo” que cada vez más estudios demuestran que sólo genera mayor desigualdad y acaba con los océanos- dos terminales de un modelo turístico altamente neoliberal.

Los activistas refirieron que intentaron presentar un “soborno” ante el despacho de la Secretaría del Medio Ambiente y Recurso Naturales (Semarnat) pero se les dijo que debían hacer cita para tener atención presencial.

Con cartulinas donde se leía “de a cómo la mordida Semarnat”, “ningun ‘desarrollo es ecocida’” y “ballenas, no cruceros”, los activistas insistieron en hacer conciencia sobre los megaproyectos que afectan el equilibrio ecológico de los dos extremos del país.

Este 25 de febrero culminó el lapso en que ciudadanas y ciudadanos pudieron presentar sus opiniones en cuanto a la información vertida en la Manifestación de Impacto Ambiental del proyecto que pretende llegar a La Paz.

Científicos e integrantes de diferentes sectores en Baja California Sur han señalado que la manifestación de impacto que presenta la empresa Aguamayan Adventures es un documento incompleto y que omite situaciones tan importantes con su proximidad al Área Natural Protegida de Balandra, por lo que se espera que la dependencia comandada por María Luisa Albores sea el primer alto ante esta amenaza.