• Dulce Gardenia el único luchador exótico que tiene en sus filas el Consejo Mundial de Lucha Libre
Agencia. – Ciudad de México
Javier Márquez Gómez es el nombre
de la persona detrás del personaje de Dulce Gardenia, el único luchador exótico
que tiene en sus filas el Consejo Mundial de Lucha Libre y que ha batallado
dentro y fuera del ring para eliminar los estereotipos que conforman la
identidad.
El nacido en Torreón, Coahuila
platicó con el ESTO acerca de lo difícil que ha sido sobrellevar los
prejuicios, comenzando con los de su familia.
“Al principio fue muy complicado,
incómodo. Al momento de que muchos conocidos y familiares se enteraron me
dijeron ‘¿qué te pasa? ¿Por qué haces eso?’ pero yo no trato de darle gusto a
nadie, simplemente lo hago por respeto, por cariño, porque me gusta y porque me
inspiré en un luchar exótico”, explicó.
Los juicios del entorno de Javier
fueron por una sencilla razón, él no es homosexual a diferencia de lo que expresa
como Dulce Gardenia, a quien creó al inspirarse en Dizy Gardenia, uno de los
primeros exóticos de la lucha libre mexicana en la década de 1940.
El luchador explicó que los
momentos más difíciles fueron cuando peleaba en su natal Torreón, sin embargo
cuando se mudó a la Ciudad de México con el CMLL todo cambió.
“Al momento de llegar al CMLL
todo cambió por completo. La gente se me entrega, me ovaciona, el ser el único
exótico de la empresa y representante de la comunidad LGBT+ es un cargo grande
pero también una satisfacción de que todo mundo esté volteando a verme. Hoy en
día es muy raro cuando alguien del público me dice alguna tontería o un mal
comentario, la mayoría son positivos”, señaló.
Como la mayoría de los atletas de
alto rendimiento, Javier Márquez también tuvo que hacer sacrificios fuertes en
su vida. El más importante fue tener que dejar a sus tres hijos en Torreón,
aunque él sabe que al final entenderán que todo lo hace por su futuro.
“Yo me vine a la CDMX por mi
familia. El estar retirado de ellos es algo triste y muy inquietante porque te
pierdes de muchas cosas, pero al momento de que piensas que lo estás haciendo
por un mejor futuro y una mejor calidad de vida todo eso se te olvida y le
echas más ganas. Ellos son mi motor”, finalizó.