El Partido Movimiento Ciudadano reapareció con una conferencia de prensa en donde su dirigente estatal Ernesto Altamirano presentó a la nueva conformación de esa representación política estatal, pero con una duda evidente: no sabe dónde fue a dar su excandidato a senador, Ramiro Ruiz y su esposa la ex candidata a la alcaldía paceña Lavinia Núñez.

El flamante dirigente estatal del partido naranja no supo decir si esta pareja de activistas, sigue aún o no dentro de las filas de este organismo político que todavía ampara a la regidora paceña, Jazmín Ruiz Cota, hija precisamente del también exdiputado local Ramiro Ruiz y a quien seguramente le queda poco tiempo dentro de este organismo.

En la rueda de prensa evidentemente improvisada y desorganizada que tuvo que salvar el representante del comité nacional, Raúl Rouzaud, quedó claro que Altamirano no sabe dónde está quien lo llevó a ese organismo político, aunque dejó en claro que ya no lo considera militante naranja.

Movimiento Ciudadano presentó a su nuevo cuadro de colaboradores de la coordinación estatal que encabeza Ernesto Altamirano quien para colmo de males realizó una pésima difusión mediante un remedo de boletín de prensa, sin pies ni cabeza, plagado de errores, un verdadero ejemplo de lo que no hay que hace cuando se prende brillar en sociedad.

Obviamente algo tendrán que hacer pues tanta improvisación y mediocridad política puede afectar a un partido que efectivamente tiene un potencial importante para participar en próximos procesos políticos.

Vale decir que en otras entidades del país como Jalisco y Nuevo León, efectivamente el MC tiene una presencia importante desde donde pueden impulsar a figuras en esta entidad para competir en los próximos procesos electorales, pero francamente tendrán que hacer ajustes reales, efectivos.

Pueden empezar por la regidora paceña Jazmín Ruiz Cota que pésimamente asesorada y dizque acuerpada, poco o nada le ha aportar al partido que dice representar y que a nivel nacional encabeza el senador Dante Delgado Renauro.

Por supuesto que con la experiencia política probada de Raúl Rouzaud es posible sacar a flote la tarea, pero está claro que en los partidos políticos la labor no es solo de una persona.

Habrá que observar ahora hacia dónde se inclinarán Ramiro Ruíz y sus fieles seguidores pues es evidente que por lo menos en este organismo político ya no están presentes.