Uno de los reclamos que han sido históricos para los gobiernos que en tuno ha tenido Baja California Sur, es la atención a la zona norte de la entidad. Las gestiones, apoyos e inversiones han sido preponderantemente en el sur de la entidad, principalmente en el ámbito turístico.

En ese sentido la actual administración estatal parece estar determinada a sacar de ese marasmo al norte de la entidad, concretamente en el municipio de Mulegé en donde las potencialidades de esa región de la media península, son muchas.

Sin embargo, por alguna razón las administraciones estatales no han propiciado adecuadamente el desarrollo de la zona mulegina.

Ahora según se ha observado en las últimas semanas, la administración que encabeza Víctor Castro Cosío ya ha hecho diversos anuncios para impulsar el municipio de Mulegé.

Por encima de que este es un municipio que tiene una administración municipal emanada de partidos como el PAN aliado con el PRI y el PRD, el gobierno estatal ha sido claro en señalar que eso no será condición para apoyar a los ciudadanos muleginos.

Incluso el presidente Andrés Manuel López Obrador recientemente estuvo en la empresa salinera enclavada en Guerrero Negro municipio precisamente de Mulegé y desde ahí se han anunciado futuros apoyos para esta región.

Para ello el mandatario estatal Víctor Castro anunció que se aplicará un “Plan de Atención Integral” que pretende elevar el nivel de vida de los muleginos mediante la construcción de diversas obras que por años los habitantes de esta región, han solicitado sin éxito.

Entre las obras que se realizarán está la ampliación de la carretera entre Guerrero Negro y Vizcaíno, conclusión de la carretera a San Francisco de la Sierra, rehabilitación de la red de drenaje en Guerrero Negro, hospital en Vizcaíno, la puesta en marcha de IMSS Bienestar para atender las zonas más apartadas de los centros urbanos, una unidad deportiva en Bahía Tortugas y programa de becas para todos los niños estudiantes de San Francisco de la Sierra, entre otras.

Obviamente esto puede marcar ya desde ahora la diferencia en la atención gubernamental a esta región del norte de Baja California Sur.

Por supuesto que habrá que hacer aún mucho más por la zona norteña de nuestra entidad, pero de mantener ese ritmo durante la naciente administración estatal, las cosas van a pintar mejor para los muleginos.

Obviamente el reto para cualquier gobierno es lograr el equilibrio en el desarrollo y atención ciudadana en general, pero vale decir que a cuatro meses de iniciada la administración de Castro Cosío, estas son buenas señales.

Sobre todo si se considera que en el norte de la entidad, tanto en Mulegé como en Loreto, los gobiernos municipales son emanados de fuerzas políticas diferentes a las que pertenece el gobernador.

Por supuesto el sudcaliforniano en general anhela con mucha claridad que independientemente de su preferencia partidista expresada a nivel municipal durante las pasadas elecciones, la autoridad estatal haga las gestiones y otorgue los apoyos necesarios a la comunidad en general por encima de alguna preferencia política.

En ese sentido vale la pena resaltar lo expresado por el gobernador Víctor Castro: “En esta administración no hay colores partidarios, vamos a respaldar a todos, igual a La Paz, Los Cabos, Loreto y Comondú”.

Que así sea.