• La semana pasada se notificaron a la OMS unos 9,5 millones de nuevos contagios por covid-19, un récord. La cifra aumentó un 71% respecto a la semana anterior. Sin embargo, el jefe de la OMS recuerda que la cifra real es probablemente superior.
Ciudad de México.- La variante
ómicron del covid-19 está matando a personas en el mundo y por ello, no debería
de ser calificada como "leve", afirmó el jueves la Organización
Mundial de la Salud (OMS).
El jefe de la OMS, Tedros
Adhanom Ghebreyesus, recordó que el alto número de casos causados por ómicron,
más contagiosa que la anterior variante delta, ha causado presión en los
hospitales.
"Aunque ómicron parece
ser menos grave en comparación con delta, especialmente para las personas
vacunadas, no significa que deba clasificarse como leve", dijo el director
de la OMS en una conferencia de prensa.
"Al igual que las
variantes anteriores, ómicron causa hospitalizaciones y está matando a
personas", insistió, agregando que el aumento exponencial de los contagios
"está desbordando los sistemas sanitarios de todo el mundo".
La semana pasada se
notificaron a la OMS unos 9,5 millones de nuevos contagios por covid-19, un
récord. La cifra aumentó un 71% respecto a la semana anterior.Sin embargo, el
jefe de la OMS recuerda que la cifra real es probablemente superior.
También aprovechó su primer
discurso de 2022 para criticar el modo en que los países ricos acapararon las
dosis de vacunas disponibles el año pasado, afirmando que se había creado el
caldo de cultivo perfecto para la aparición de variantes del virus.
Es "muy poco probable que
ómicron sea la última variante de la que se oiga hablar, no será la última
variante preocupante", advirtió por su parte la directora técnica
encargada del covid-19 de la OMS, Maria Van Kerkhove.
En ese sentido, Tedros instó
al mundo a repartir las dosis de vacunas de forma más justa en 2022.
El objetivo de la OMS era que
todos los países tuvieran el 10% de su población vacunada para finales de
septiembre de 2021 y el 40% para finales de diciembre.
De los 194 Estados miembros de
la OMS, 92 no alcanzaron el objetivo fijado y, de hecho, 36 de ellos ni
siquiera habían vacunado el 10% de su población, en gran parte debido a la
imposibilidad de acceder a las dosis.
"La desigualdad en el
acceso a las vacunas mata a personas y puestos de trabajo y socava la
recuperación económica mundial", insistió el jefe de la OMS.
"Una dosis de refuerzo
tras otra en un pequeño número de países no acabará con una pandemia mientras
miles de millones siguen completamente desprotegidos", denunció.