• Los ambientalistas consideran que, al importar gas natural de los Estados Unidos se pone en riesgo la “soberanía energética nacional”.
La Paz, Baja California Sur. Para cumplir una orden judicial de no continuar con los proyectos de generación eléctrica a partir de gas fósil, la organización ambientalista Greenpeace México, considera que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) debe suspender sus contratos en la central de ciclo combinado de Baja California Sur y cinco plantas más en todo el país.
Lo anterior en relación al procedimiento de contratación para realizar los proyectos de las centrales de ciclo combinado de Baja California Sur, San Luis Río Colorado, Tuxpan, Valladolid, Mérida y González Ortega, obras que la CFE había anunciado a mediados de marzo pasado y cuyas licitaciones se son lanzadas bajo el esquema de “paquetes”.
De acuerdo con la organización no gubernamental, la paraestatal tiene 24 horas para frenar el proceso de contratación para estas obras.
La organización relata que el 26 de marzo de este año, el juez Primero de Distrito en Materia Administrativa, concedió a Greenpeace México una suspensión definitiva en el amparo 135/2021, a fin de paralizar todos los efectos y consecuencias derivados de la Ley de la Industria Eléctrica, así como del apartado 7.8 del Programa para el Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (PRODESEN) 2020-2034 que incluye las obras de interconexión y refuerzo asociadas a las seis centrales eléctricas de tecnología con base en gas natural.
La organización ambientalista considera que la CFE ha incumplido la suspensión otorgada, y para no caer en desacato deberá abstenerse de concluir los procedimientos de contratación.
En un comunicado, indicó que el juzgado de lo administrativo concedió a CFE un plazo de 24 horas, a partir de que sea notificada, para rectificar, subsanar y ajustar su actuar a esta determinación adoptada el pasado viernes 26 de noviembre.
“Celebramos la resolución del Juzgado al tiempo que lamentamos que la CFE continúe con sus planes que nos atan a la dependencia de los combustibles fósiles, principalmente al gas fósil, que al ser en su mayoría importado de Estados Unidos, pone en riesgo la seguridad y soberanía energética nacional. Fortalecer un modelo como éste resulta anacrónico en un momento en el que el futuro de la vida, en todas sus formas, pende de la voluntad política para poner fin a los combustibles fósiles y sus graves impactos al clima, la biodiversidad y la salud de las personas”, declaró Aleira Lara, directora de campañas de Greenpeace México.
El 26 de marzo del presente año, CFE formalizó un contrato de suministro de gas natural con la empresa privada New Fortress Energy de hasta por 20 millones de pies cúbicos diarios para abastecer a dos centrales ubicadas en La Paz, Baja California Sur: CT Punta Prieta y CCI Baja California Sur.
Ambas centrales cuentan con una capacidad dual de generación (es decir, pueden emplear tanto Diesel como Gas Natural), lo cual permite sustituir el consumo de diésel por gas natural, disminuyendo el impacto de emisiones contaminantes en la zona.
Adicionalmente, la CFE ha destinado seis unidades aeroderivadas de generación, para reforzar el sistema eléctrico de Baja California Sur, las cuales ya se encuentran instaladas y en disponibilidad de ser despachadas por el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace).