Sometidos a alta presión ayuntamientos de BCS por cercanía de los pesados compromisos decembrinos. A cerca de dos meses de iniciar actividades las alcaldías funcionan con altas y bajas administrativas Los Cabos único ayuntamiento con autosuficiencia económica y hasta ahora el más operativo.
Los nuevos ayuntamientos de Baja California Sur, cumplen ya casi dos meses de haber iniciado sus operaciones por lo que a querer o no ya es necesario hacer un breve balance de su labor sobre todo porque dentro de pocos días, entrarán a la tradicional etapa de alto estrés que implica la serie de compromisos decembrinos que tiene que atender.
La entidad está conformada por cinco municipios que tienen diversa problemática y necesidades muy específicas, está claro definitivamente que los ayuntamientos norteños no son igual que los del sur.
En el norte los recursos son más difíciles de obtener mientras que en el sur, tanto en La Paz y Los Cabos, el flujo de la economía es más ágil.
Obviamente por lo mismo, la atención de los gobiernos estatal y federal, es diferente.
En Los Cabos prácticamente existe una autosuficiencia económica que ya la quisieran el resto de las municipalidades.
Pero además de lo económico, las comunidades se comportan de manera muy diferente.
En el norte de la entidad las alcaldías de Mulegé y Loreto, cuentan con alcaldesas al frente de sus respectivos ayuntamientos que hasta ahora han podido sacar adelante su labor y aunque el fin de año suele ser un cuello de botella administrativo, lo cierto es que no se encuentran sumidos en la fricción que hasta ahora presenta el ayuntamiento de La Paz bajo la cuestionada conducción de la alcaldesa Milena Quiroga.
Por supuesto que en la zona central de la entidad en el municipio de Comondú la población espera que las cosas marchen mejor que en la administración anterior que fue un verdadero desastre y se espera que al cierre del presente año se cuente con el suficiente recurso para enfrentar todos los compromisos con trabajadores y proveedores comundeños.
En el caso de Los Cabos es obvio que el tratamiento político administrativo y económico se cocina aparte.
En el municipio cabeño, de manera inmediata el nuevo gobierno municipal que encabeza Oscar Leggs puso manos a la obra y diversos programas municipales ya están en marcha.
Obviamente no se trata solo de la disposición de recursos económicos sino de la conformación de equipos de trabajo con perfiles adecuados que puedan dar buenos resultados a la ciudadanía, por
lo que hasta ahora a pocas semanas de que concluya el presente año, en Los Cabos la administración municipal ya tiene perfilada una agenda clara sobre los asuntos a tratar.
En el municipio de La Paz, esto no es así.
Aquí falta un verdadero equipo de trabajo preparado que ayude a la alcaldesa Milena Quiroga a salir del hoyo en el que ya se encuentra y que le ha provocado una serie de críticas que dejan en claro que el ayuntamiento paceño aún no ha podido despegar adecuadamente sus supuestos planes de trabajo.
En general los ayuntamientos de Baja California Sur, tres emanados de Morena-PT y dos de la alianza entre el PAN y PRI, en breve se enfrentarán a los pagos de vacaciones, prima vacacional, aguinaldos y proveedores en general a más tardar para el 15 de diciembre.
Ello mete en un serio conflicto administrativo a todas las presidencias municipales por lo que habrá que ver cómo se resuelve esta situación que año con año viven los alcaldes y alcaldesas.
Se enfrentarán a una verdadera prueba de la que tendrán que salir airosas las alcaldías para demostrar así que se cumplirá con la expectativa generada durante el pasado proceso electoral en donde la población confió con su voto en los ahora munícipes de que podrían sacar adelante sus respectivos ayuntamientos.
Esperemos que sea así si queremos evitar que las fiestas tradicionales de fin de año se conviertan en verdaderos lamentos municipales.
Ya veremos qué sucede.