Las diversas formas de “hacerse pendejo”; que puede ser una táctica o estrategia efectiva, o fallida…Análisis de casos comunes y políticos, sociales y demás…
No sé a usted pero a mí sí me ha sucedido el soportar y al mismo tiempo tolerar, o “seguirle el juego” (supuestamente) por y con cierto respeto y hasta consideración, o “para calarlos a ver hasta dónde llegan” y/o en otras palabras, uno HACERLE PENDEJO…con ese tipo de personas que por lo general son conocidos o amistades que por una u otra razón están en tu entorno de convivencias, conversaciones y demás. Sin embargo, por lo general -como sería mi caso- los toleramos pero más bien como táctica o estrategia, por ejemplo cuando “le conocemos el lado” de personalidad o perfil para que se extiendan en la información o el chisme, a veces político, a veces social, de conductas individuales, negocios, etc.
Y discúlpenme, se me pasaba que en estos casos no sólo están de estos tipos sino también los que simplemente discuten por todo, que son tercos, que quieren meter su “opinión” “a huesos caldo” y esto sin tener un verdadero soporte de conocimientos, en otras palabras, son ignorantes y…hasta pendejos (que no es lo mismo); de veras, hay casos así…
Así entonces, el caso y tema de hoy es que al estudiar y analizar de mi parte más a fondo sobre estas conductas (que no hacen mucho daño por cierto, si uno “se hace pendejo”), una de las conclusiones a que llegué es que por lo general estos son más pendejos que uno pero creen que nos hacen pendejo; o sea, un pendejo cree que hace pendejo al otro que lo escucha, un rato…y con eso queda feliz (como el mitómano o que miente por sistema) que no duerme bien si no echa sus mentiras fuertes ese día; ¿verdad que sí?, usted los conoce…Sin embargo, sólo añadiré lo que hace un par de años comenté sobre de que de nada sirve, que es inútil, discutir con ignorantes y con pendejos aunque digan que saben todo; esos que siempre quieren tener tercamente la razón; Pues no, hay que sacarle a esas “discutideras”…
Bien, a ver si me doy a entender con este fragmento de humor pero que hay que entender su fondo o trasfondo…Le pregunto el alumno al maestro: MAESTRO CUÁL ES EL SECRETO DE LA FELICIDAD.
--NO DISCUTIR CON PENDEJOS. --YO NO CREO QUE ESA SEA LA CLAVE DE LA FELICIDAD MAESTRO.
--TIENES RAZÓN. Sin comentarios. Órale.
Y YA METIDO EN COSAS DE SENTIMIENTOS Y CONDUCTAS HUMANAS, AÑADIRÉ ESTOS CONCEPTOS.
Es que ya ven, selectos lectores, que a veces me da por intercalar en mi periodismo temas de reflexión, de pensamientos, de frases y refranes, también temas de amor, de poesía, de aficiones, de conducta, etc. independientemente de los temas políticos ya conocidos por ustedes. Por ejemplo, hoy comentaré también brevemente algo sobre esos importantes sentimientos y conductas que se dan en los humanos, por lo que he venido publicando una especie de serial-temas reiterados-sobre la temática de las causas y efectos de esos males basados en la mentira, la falsedad, el engaño, la ingratitud, la deslealtad-infidelidad hasta la mismísima traición, así, con esta gradación (de grados) de menor a mayor en sus efectos; que les he puesto más atención, no solamente por lo que a mí me han afectado algunos de estos grados, sino por lo que he visto y oído en el contexto político-social y en la sociedad misma, de “amistades” supuestas y también reales, claro, (“no todo está podrido en Dinamarca”) que esta temática no sólo me sirve de desahogo sino también para analizar en mis temas periodísticos-y la vida misma-por razones obvias.
ALGO SOBRE LA ENVIDIA Y LOS CELOS; LA FALSEDAD, INGRATITUD; DESLEALTAD Y TRAICIÓN…
Así, en pequeños fragmentos daré la idea (temas que ya desarrollé ampliamente). Para comprender qué es la envidia basta con mirar a nuestro alrededor. Aquella persona que ha logrado desarrollarse personal o profesionalmente es mirado con desconfianza y recelo por parte de otros individuos. Las personas envidiosas no pueden soportar pensar que hay otros sujetos que han tenido más suerte o han alcanzado cotas de éxito superiores a ellos. EL FALSO, éste “vive en su mentira”…El falso es una víctima de su propia mentira, mientras que el mentiroso no siempre se ve perjudicado…quizá ni el hipócrita que finge (de estos hay muchos en la política), y de todos estos males el único que se castiga penalmente, constitucional, es LA TRAICIÓN pero no cualquier traición, sólo la llamada “Traición a la patria” con pena de muerte, (que en la época moderna en México nunca se aplica y vaya que hay muchos traidores a la patria sin que sean espías o en una guerra, pero la traicionan (ustedes saben quiénes…). La traición siempre conllevará LA INGRATITUD-que, vaya que la he sufrido en lo personal-lo que sería un tema aparte…
Las otras traiciones no serían penales pero-junto con las deslealtades, infidelidades- la vida y las reglas con principios y valores sí los van castigando, en diversas formas: la pérdida de confianza, con el “cierre de puertas”, el desprestigio (fulano/a de tal ya no vale nada, por desleal, por infiel, por ingrato, por traidor; y viceversa o lo contrario, la persona que no miente por sistema, ni es falsa, ni ingrata, ni desleal, ni traidora, la misma sociedad, las familias, sus círculos de amistad, lo valoran muy bien, y hasta recompensan con la respuesta social, comercial, política, humana, etc…
COMO ME FALTABA UNO MUY IMPORTANTE, LA SOBERBIA, RETOMO LOS SIGUIENTES CONCEPTOS:
“La soberbia complica mi vida, ¿qué hago?. Lo más difícil: “Hay que ser consciente del problema; los afectados no suelen darse cuenta a no ser que alguien en su entorno apriete mucho y les ponga contra las cuerdas”, señala Blanco. No obstante, es difícil que otra persona se atreva a presentarles la realidad tal y como es; sobre todo porque los soberbios buscan gente SUMISA Y DEPENDIENTE a su alrededor “para ser ellos los dueños y señores”. Según el psicólogo, es imprescindible trabajar la empatía y aprender a recibir críticas. “Como no supe que era imposible, lo hice”.
En la mente del soberbio no existen barreras: “Se siente grandioso y cree que puede hacerlo todo, lo que le ayuda a perseguir sus objetivos”, señala González. Aunque debemos reconocer las propias capacidades, no es conveniente exagerarlas. Hace falta desprenderse de ese halo de prepotencia que a menudo nos impide ser realistas. *LA PREPOTENCIA Y LA SOBERBIA te harán sentir fuerte sólo unos instantes, sólo un tiempo, la humildad te hará grande y fuerte toda la vida!
HORARIO.- PARA ABUNDAR, VEAMOS ESTA SELECCIÓN DE FRASES CÉLEBRES SOBRE LA ENVIDIA.
Son citas célebres que nos hablan sobre esta sensación negativa. De nosotros depende evitar que enraíce en nuestro modo de ver las cosas. Van: *.- NUESTRA ENVIDIA DURA SIEMPRE MÁS QUE LA DICHA DE AQUELLOS QUE ENVIDIAMOS. (François de La Rochefoucauld). Solemos concebir el éxito de los demás como mucho más relevante de lo que realmente es. *.- QUIEN NO ES ENVIDIADO, NO ES DIGNO DE SERLO. (Esquilo de Eleusis). *.-¡OH ENVIDIA, RAÍZ DE INFINITOS MALES Y CARCOMA DE LAS VIRTUDES! (Miguel de Cervantes). Sobre la negatividad que genera la envidia. *.-NO ENVIDIES LA RIQUEZA DEL PRÓJIMO. (Homero). El dinero viene y va, ningún ser humano debería ser envidiado por razón de su capacidad económica. *.-LA ENVIDIA SANA NO EXISTE: lamentablemente, toda envidia causa un malestar y es un perjuicio para lograr nuestros propósitos. (Jonathan García-Allen). *.-EN CUANTO EL HOMBRE ABANDONA LA ENVIDIA EMPIEZA A PREPARARSE PARA ENTRAR EN EL CAMINO DE LA DICHA. B. Días.