La Paz, Baja California Sur. Activistas de Cozumel y La Paz que se han organizado contra la llegada del turismo náutico de gran escala, sostuvieron el foro “no lo haga, compa”, donde discutieron sobre la desaparición de la experiencia turística y la depredación de los recursos marinos al amparo de los marcos normativos a modo, donde se permite la entrada del turismo náutico de gran escala.

El día 30 de septiembre por la tarde diversas asociaciones dedicadas al activismo ambiental sostuvieron el conversatorio “No lo haga, compa” sobre el turismo de masas y la industria de cruceros, con el objetivo de evidenciar los daños que ha causado un falso modelo de desarrollo turístico y la industria de cruceros en Cozumel, y para repensar acciones para frenar la expansión de este modelo en La Paz, Baja California.

Moderado por Priscila Hernández Flores y participaron los panelistas: Germán Méndez, Biólogo en Cozumel; Frida Lara, Biólogx en La Paz; Lupita Martín, Activista en Cozumel; Alekz Águila, Activista en La Paz; y Mina Morsán, del Caribe Mexicano

Los activistas de Cozumel hablaron de los efectos de la entrada del turismo náutico de gran escala en la isla del caribe, mientras que los de La Paz, Baja California, presentaron el panorama que se presentó ante los intentos de la llegada de este tipo de embarcaciones al estado.

Alejandro Aguila, de BCSicletos La Paz, informó al panel de la situación que se vivió en La Paz con la intención de construir una terminal de cruceros en el estado por parte de APIBCS, la cual, dijo, se maneja en opacidad gracias al marco legal sudcaliforniano.

 “El año pasado la Administración Portuaria Integral del Gobierno del Estado, que es esta paraestatal que maneja todos estos proyectos, licitó un proyecto de mega cruceros para que lleguen a Pichilingue […] Hay mucha opacidad, la Ley Estatal de Asociaciones Público Privadas permite que estos proyectos no sean regidos por reglas de transparencia […] Podemos ver cómo la Ley protege a estos proyectos para no dar transparencia presupuestaria y no sean licitadas por las mismas reglas”, expuso Alejandro Águila.

En ese mismo sentido, Mina Morsán expuso que lo que llamó el “modelo fonatur” afecta a diferentes puntos turísticos a donde llegan los cruceros:

“Este modelo de turismo, el llamado modelo Fonatur, propone escenarios bastante parecidos entre sí. Si tú te vas a la zona turística de Cancún, Nuevo Vallarta, Puerto Vallarta, Mazatlán o cualquier sitio, notas cierta homologación sistémica, no sólo es el saqueo de recursos marinos o costeros, sino que se vacía de significado cultural los sitios”, expresó.

El evento se transmitió en redes sociales por las organizaciones como el Movimiento en Defensa Territorial Bciscletos, Coral Hero y Planeteando.