Ciudad de México. El cambio de estrategia de Petróleos Mexicanos (Pemex) de explorar en aguas someras y en tierra ha significado uno de los mayores éxitos en la actual administración, pues en 18 años de hacerlo en aguas profundas no se obtuvo “un sólo barril de petróleo”, dijo Octavio Romero Oropeza, director general de la empresa estatal.

Durante una reunión con miembros de la Asociación de Bancos de México (ABM) realizada el lunes, el funcionario comentó que la petrolera continúa siendo el principal contribuyente del país.

“La administración actual de Pemex abandonó la fallida estrategia de exploración de aguas profundas en la que en 18 años no se obtuvo un sólo barril de petróleo”, indicó en una presentación que se mostró a ejecutivos de bancos que operan en el territorio mexicano.

En la información presentada se destacó el campo terrestre Ixachi. La petrolera apuntó que fue descubierto en 2017 y al año siguiente comenzaron los trabajos exploratorios en los que casi triplicó sus reservas. Actualmente el yacimiento tiene mil 592 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.

Destacó el campo “prioritario” Quesqui, el cual se encuentra en Tabasco, con 916 millones de barriles de crudo equivalente de reserva.

Recientemente la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) aprobó a Pemex modificar el plan de transición de dos asignaciones que se encuentran en el interior del yacimiento, pues la empresa tuvo retrasos en el plan original a raíz de la pandemia de Covid-19. Por la modificación, Pemex invertirá mil 27 millones de dólares.

La empresa informó que el campo Valeriana tiene 860 millones de barriles de petróleo equivalente. Los campos de Racemosa y Dzimpona son importantes, pero tienen reservas de menos de 500 millones de barriles de crudo .

En una comparación gráfica la petrolera mostró que en la década de los 80 el yacimiento Ku poseía 3 mil 602 millones de barriles de crudo equivalente.

La información de la empresa señala que entre 2005 y 2012 los resultados en la exploración fueron muy bajos, como es el caso del descubrimiento del pozo Kayab, con 134 millones de barriles de crudo equivalente, mientras Trion se ubicó como el yacimiento con el mayor potencial con reservas por 482 millones de barriles.

La petrolera estima que las ventas para este año sean de un billón 621 mil millones de pesos, monto que representaría el 6.3 por ciento del producto interno bruto (PIB).

“Focalizar los recursos de inversión en exploración en aguas someras y en tierra ha sido un éxito para Pemex”, señaló al resaltar los resultados de los descubrimientos de los últimos años.

“Al 31 de julio de 2021, la producción de los nuevos desarrollos de Pemex equivale a nueve veces la producción de las empresas privadas y se logró en un tercio de tiempo”, subrayó en un mensaje de Twitter.

Romero Oropeza destacó que Pemex es el contribuyente número uno del Servicio de Administración Tributaria (SAT). De acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda que la empresa mostró a inversionistas en agosto, los ingresos petroleros entre enero y julio de este año fueron de 427 mil 100 millones de pesos, dato que significó un aumento de 62.9 por ciento en términos reales, mientras los ingresos tributarios lograron crecer 1.1 por ciento real.

Romero Oropeza mencionó que Pemex es la compañía número 20 en el mundo por su producción, reservas y capacidad de refinación, aunque sólo en esa última actividad ocupa el lugar 16 en todo el mundo.

Agregó que “a más de 7 años de la reforma energética, Pemex soporta casi la totalidad de la producción petrolera del país y, en lo que va del año, continúa extrayendo casi el 99 por ciento del crudo en México”.