• El líder priista en Los Cabos calificó como una farsa y un distractor más del presidente de la república la consulta celebrada ayer.
San José del Cabo, Baja California Sur. Ayer el Instituto Nacional Electoral (INE) llevó a cabo la Consulta Popular 2021, en la cual se le preguntó a la ciudadanía si están o no de acuerdo en enjuiciar a los expresidentes. Esta consulta popular fue promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador y el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Este ejercicio democrático es el primero en su tipo en el país y provocó toda clase de opiniones divididas, principalmente de los partidos de oposición, como el Partido Revolucionario Institucional (PRI), el cual consideró que fue una farsa que, además, costó más de 500 millones de pesos, dijo Andrés Liceaga Gómez, presidente del PRI en Los Cabos.
“Es una farsa y un distractor más del presidente de la república. La justicia y su impartición nunca debe consultarse, debe aplicarse conforme a las normas que nos rigen como Estado mexicano, y esta pseudo consulta es un intento más de distraer a los ciudadanos ante los graves problemas que se viven en el país”, dijo Liceaga Gómez.
Explicó que cualquier expresidente que hubiese cometido un delito o violado una ley, en efecto, debe ser castigado, sin embargo, para ello no es necesario hacer ningún tipo de consulta.
“Resulta ofensivo para la inteligencia de los mexicanos que se pretenda consultar sobre un tema de estos, ya que se deja en duda la verdadera persecución de oficio de los delitos de parte de las autoridades, es decir no podemos consultarle a la ciudadanía el aplicar o no la ley”, manifestó Liceaga Gómez.
Mencionó que si hay pruebas de que cualquier ex presidente hizo mal uso de un cargo público o cometió un delito deberán ser presentadas y así la fiscalía deberá llevar a cabo un proceso, el cual no debe ser consultado, además de no ser necesario gastar cientos de millones de pesos, sumado a ello la consulta dijo el líder priista en Los Cabos nada abona a la unidad nacional, por el contrario, divide a la población entre los que dicen estar con López Obrador o contra éste.