• El presidente afirma que su administración es ‘honesta’ y no existen relaciones con grupos de interés; sostiene que no hay persecución a opositores ni censura a medios
CIUDAD DE MÉXICO. Al asegurar que la Cuarta Transformación es
“honesta”, el presidente Andrés Manuel López Obrador descartó que haya algún
acuerdo “con las mafias”, por lo que continuará con sus labores en favor de la
ciudadanía.
Luego de que el excandidato de la entonces alianza PAN-PRI-PRD, “Va por
México”, Ricardo Anaya, asegurara que es perseguido político, el presidente
rechazó esto y aclaró que contrario a lo que sucedía antes, en México hay
libertades y no se espía ni persigue a nadie.
“Ya no andamos espiando a los
opositores como era antes ni persiguiendo a ningún opositor ni censurando a
ningún medio. En México hay libertades para todos, no hay represión para
ciudadanos, periodista, opositores, como nunca”, dijo.
Aclaró que actualmente la inteligencia del Estado sólo se utiliza para
enfrentar a las organizaciones criminales y que no hay relación alguna con
grupos de interés, pues el compromiso que tienen él y su gobierno es con la
ciudanía.
López Obrador además reiteró que la Cuarta Transformación continuará
pese a sus adversarios.
“Como me toca encabezar un gobierno honesto, no hay relaciones de
complicidad con nadie ni con ningún grupo de interés creado: ni con
delincuencia organizada ni de cuello blanco. No hay ningún acuerdo con las
mafias, nosotros llegamos aquí porque lo decidió el pueblo no para representar
a ningún grupo de interés creado.
No le voy a fallar al pueblo, aunque no le
guste a mis adversarios. La transformación va hacia adelante”, sostuvo.
Además aprovechó para aclarar, una vez más, que él no tiene que ver con
las acusaciones en contra de Ricardo Anaya, sino que éstas tiene su origen en
una denuncia del ex director de Pemex, Emilio “L”.
Explicó que la denuncia presentada por el ex director de Pemex tiene que
ver con la presunta entrega de dinero a legisladores y líderes partidistas por
la aprobación de la Reforma Energética, que, afirmó, no benefició a la
ciudadanía.
“Entregaron esos sobornos para aprobar la reforma y resulta que se
entregaron concesiones para que algunas empresas hicieras jugosos negocios en
Pemex y la CFE, pero ¿qué ganaron los ciudadanos? ¡Nada, perdieron!, porque a
partir de esa reforma aumentaron los precios de las gasolinas, del gas, de la
luz y se puede probar”, dijo.