• Crecieron las pérdidas 134% con respecto a lapso similar en 2020.
Ciudad de México. En el primer
semestre de este año el costo para Petróleos Mexicanos (Pemex) por la
sustracción ilegal de sus ductos de gas licuado de petróleo (LP) ascendió a 600
millones de pesos, según datos de la empresa estatal.
El monto de
pérdidas económicas por el ilícito es superior 134.37 por ciento, en términos
nominales, respecto a los 256 millones de pesos reportados en el periodo
comprendido entre enero y junio de 2020.
Pemex ha
calificado la estrategia al combate del robo de combustibles –que incluye gas
LP, gasolinas y diésel– de “exitosa”, pues al cierre del primer semestre del
año se redujo 12.5 por ciento el volumen de energéticos hurtado, respecto al
mismo periodo de 2020.
En el primer
trimestre del año, último periodo para el que hay información oficial
disponible, el número de tomas clandestinas de gas LP aumentó 44.7 por ciento
frente a igual lapso de 2020, pues se detectaron 692 puntos para hurtar el
combustible, cuando el año pasado fueron 478. Aunque el robo a gasolinas era
crítico al inicio de la actual administración, después de las acciones
emprendidas por el gobierno para detener esos ilícitos, los grupos delictivos
se dirigieron a extraer de la red de distribución de Pemex gas LP, el
combustible que es usado en 8 de cada 10 hogares del país.
Datos de la
Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas (Amexgas) señalan que el hurto de
gas LP se concentra en los estados de México, Ciudad de México, Puebla,
Hidalgo, Veracruz, Tlaxcala, Jalisco, Querétaro, Guanajuato y Tamaulipas.
Pemex señaló que
Puebla se ha colocado como la entidad con el mayor número de robo de gas LP,
pues halló en los tres primeros meses del año 537 tomas clandestinas, dato que
se tradujo en un incremento de 42.8 por ciento.
Le sigue el estado
de México, donde pasó de 46 tomas clandestinas a 60 respecto del primer
trimestre, lo cual se tradujo en un incremento de 30.3 por ciento.
Tlaxcala se ubicó
como la tercera entidad con mayor número de lugares donde se sustrajo el
energético, pues la empresa estatal señaló un aumento de 114.8 por ciento
respecto a enero a marzo de 2020.