• Los pasivos totales se incrementaron en 34 por ciento, a mil 726 millones 47 mil 834 pesos, de acuerdo al estado de situación financiera de marzo de 2021.
La Paz, Baja California Sur. Rubén Gregorio Muñoz Álvarez hizo diversos compromisos de campaña para llegar a la presidencia municipal de La Paz, Baja California Sur (BCS), con los partidos Morena y el extinto Partido Encuentro Social (PES); uno de ellos, que no cumplió, fue “no endeudar a los paceños”.
Esto confirma el Estado de Situación Financiera del Ayuntamiento de La Paz, correspondiente al corte de marzo de 2021; en este documento se refleja un pasivo total por mil 726 millones 47 mil 834 pesos, es decir, un incremento de 34 por ciento.
Si se dividiera el pasivo total entre los 250 mil 141 habitantes que contabilizó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en 2020 en el municipio, cada ciudadano debería pagar la cantidad de 6 mil 900 pesos y 30 centavos, para cubrirla en su totalidad.
Armando Martínez Vega, el alcalde predecesor del Partido Acción Nacional (PAN), dejó el cargo en septiembre de 2018 entre diversas críticas de Muñoz por el incremento de la deuda; en ese momento dejó mil 303 millones 925 mil 544 pesos en pasivos totales.
No obstante, luego de la entrada de Rubén Gregorio Muñoz Álvarez, la deuda pública se fue incrementando, en promedio, 14.3 millones de pesos mensuales; además, se permitió la contratación de 3 créditos bancarios más en diciembre de 2019, mayo de 2020 y octubre de 2020.
El primer crédito, fue solicitado a Lumo Financiera, con el número 00365-CS-002-LCF, el 22 de diciembre de 2019, por un total de 60 millones de pesos; esto sin comunicación ante el cabildo, para pagar los “aguinaldos” y compromisos decembrinos.
No obstante, los siguientes 2 créditos, se autorizaron luego de la caída de la recaudación por la pandemia de la COVID-19, ante Banco Bansí, originario de Jalisco; prestó primero 90 millones de pesos, el 25 de mayo de 2020 y luego 27 millones más, el 12 de octubre del mismo año.
A pesar que el alcalde ha presumido “ahorros” y “estructura financiera”, la realidad es que la deuda contratada sigue presente y las cuentas públicas de 2020, cuentan con 5 meses de atraso, ya que no han sido presentadas ante el Cabildo de La Paz por su administración.