Los Cabos, Baja California Sur. El nodo vial Leona Vicario-Boulevard Constituyentes de Cabo San Lucas, al que lo “bautizaron” los ciudadanos como el “Puente 2015”, no por el año que fue edificado sino porque por arriba pasaban 15 carros contra los dos mil que transitan por abajo, tiene toda una historia de caos vial desde su construcción. 

Y el chiste de llamarlo “2015” coincide con su primer trazo, que sólo por arriba llevaba al libramiento de cuota a San José del Cabo (SJC), sin tener la mínima solución al caos vial del nodo más importante de Cabo San Lucas (CSL), considerando los flujos de movilidad desde las colonias al corredor turístico.

Con dos modificaciones en su historia, en donde ya sirvió el segundo piso como un “bypass” desde SJC hacia La Paz, el Puente Leona Vicario vuelve a ser conflictivo con sus reparaciones recientes por daños en la carpeta asfáltica. Consideran comerciantes de la zona que se debió considerar hacer el “bypass”, pero desde la parte norte de calle Leona Vicario y hacia SJC, que es de donde más flujo vial recibe el cruce.

Por ahora, el puente sólo resulta benéfico para liberar carga vial desde CSL hacia SJC, pero nada más. Una vez bajando del puente, la carga vehicular se aglomera en ambos sentidos. En la parte baja, el tráfico en horas punta es el mismo, también en ambos sentidos. 

Esperan ciudadanos y automovilistas que el trazo de este puente algún día mejore y de verdad sea para el uso y disfrute de toda la comunidad, liberando un poco las cargas viales de la zona.