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Hoy es domingo, 24 de noviembre de 2024

¡Auriazules, de fiesta! Sin miedo al América, así fue el debut de Pumas en Primera División en 1962

• Se cumplen 59 años del debut de Pumas en la Primera División y Alfredo Echávarri, miembro de aquel equipo universitario, recuerda en entrevista cómo fue su estreno ante el América.

¡Auriazules, de fiesta! Sin miedo al América, así fue el debut de Pumas en Primera División en 1962

Ciudad de Mexico.- El 1 de julio es una fecha memorable para los Pumas de la UNAM, pues este día cumplen 59 años de su debut en la Primera División del futbol mexicano. Luego de conseguir el ascenso, el cuadro de la universidad se estrenó en el máximo circuito y lo hizo ante el que hoy es su rival más odiado: las Águilas del América.

 

América tenía el derecho de jugar contra los equipos que lograban el ascenso a inicios de la década del 60. Pumas no fue la excepción y ese 1 de julio de 1962 ambas escuadras se enfrentaron por primera vez en la cancha del Estadio Olímpico Universitario donde las Águilas se llevaron el triunfo 2-0 y los auriazules se dieron cuenta que serían capaces de aferrarse a Primera División.

 

El debut de los Pumas lo vivió Alfredo Echávarri, integrante de aquel equipo felino que había logrado el ascenso y estaba preparado para disputar ante un equipo lleno de estrellas como lo eran las Águilas.

 

“El equipo se reforzó y el día primero de julio fue un día espectacular para uno, llegar al estadio, nuestro estadio, que era como nuestra casa y contra el equipo más antiguo. En ese tiempo se acostumbraba que jugara el primer partido el equipo más antiguo y nos tocó jugar contra el América. El estadio estaba a tres cuartos de público y los nervios los teníamos más templados por la experiencia en el proceso; pudimos hacer un futbol más o menos atractivo con la idea de dar espectáculo y gustó mucho a la gente”, recordó Echávarri en entrevista.

 

Pumas se reforzó con un par de brasileños, Mario Braga ‘Babá’ y Sauí Ouracy, además de Ignacio Martínez que llegaba de Guadalajara. Aquella tarde se vivió la primera derrota en un partido que no fue sencillo para las Águilas, pues los periodistas de aquella época como Fernando Marcos destacaron el estilo y la garra del club recién ascendido.

 

Primer conato de pelea en la historia del Pumas-América

Echávarri nunca imaginó la pasión que desataría con los años un duelo como Pumas-América y menos que jugarían tres Finales de Liga. Sin embargo, recuerda cómo fue el primer conato de pelea en la cancha del Olímpico.

 

“No, la verdad no imaginé, fue creciendo a través del tiempo y de la historia porque además se mezcló con las fuerzas inferiores, las fuerzas básicas con aguerridos jugadores, fue creciendo esa pasión que despierta el futbol y tienes que controlarla para no echar a perder los partidos y evitar las agresiones”, señaló.

 

 “Hubo hasta fricción entre los jugadores porque con Calderón de la Barca, nuestro centro delantero, era muy técnico, tenía una calidad para meter el cuerpo, proteger la pelota, disparar a gol, entonces le empezaron a cargar la mano y hubo ciertos conatos de bronca, desde ese primer partido empezó la disputa entre esos dos clubes, pero nunca llegó la sangre al río”.

 

Pumas perdió el partido 2-0 ante las Águilas con goles de Moacyr, con remate de tijera, y Antonio Jasso, de tiro libre, pero la enseñanza sirvió al equipo pese a tener un rival plagado de figuras.

 

 “Ya nos codeamos con grandes jugadores del América como eran Paco Ulibarri, Severo de Sales, Pedro Nájera, Ataúlfo Sánchez, un gran portero argentino, Juan Bosco, ya tradicionales en el América. Pepín González, Toño Jasso, Zague, Moacyr y Ronald Martell era la alineación del América. Aunque perdimos, salimos satisfechos y dijimos sí la vamos a poder hacer”, recordó.

 

La primera playera de Pumas

Hoy en día se trata de una de las playeras más famosas y prestigiosas del futbol mexicano, pero en 1962 los Pumas todavía no usaban su tradicional escudo, sino que era una playera que diseñó y confeccionó el propio entrenador Octavio Vial.

 

“Octavio Vial tenía una casa de deportes en la calle de Uruguay, en el centro, y nos regalaba una bola de cosas. Él diseñaba el uniforme y los hacía en su taller, fueron variando desde ser amarillos con una V cruzada al frente, luego fue la del campeonato que era una camiseta azul de manga larga, el short azul y medias azules, muy elegante. No tenía todavía el Puma.

 

“El primero de julio de 62 usamos una camiseta que tenía un filo en el cuello de manga larga, pero no era igual a la de Segunda (División), esta era como playera, short azul y medias azules, el escudo con la cara del Puma, éste ya no era con la U que usamos en Segunda División”.

 

Echávarri pudo jugar en América

La familia Echávarri fue importante para la historia de Pumas, pues Manuel Echávarri fue el primer capitán del equipo en la Segunda División y en el caso de Alfredo, además de sostener al club en Primera, también estuvo cerca de jugar en el América.

 

El entrenador Roberto Scarone lo llamó para integrarlo a la plantilla y a pesar de que hizo la pretemporada y jugó varios amistosos, decidió no firmar porque no quiso esperar a que Guillermo Cañedo, entonces presidente azulcrema, volviera de un viaje para arreglar su contrato.

 

“Un día me habló Scarone, que era el entrenador del América. Un amigo que había sido directivo del América me dijo que se iba a retirar Toño Jasso. Entonces me buscaron y me fui con el América a entrenar, hice una pretemporada con el América y estaba el equipazo que tenía a Vavá, el campeón mundial (con Brasil en Chile 62), Arlindo dos Santos, Moacyr, Zague, un equipazo. Scarone me dio mucho chance, inclusive jugamos un partido contra Chile que se estaba preparando y jugó contra América en los campos de Tlalpan. Le ganamos 4-3, metí dos goles ese día y estaba encantado”, reveló.

 

“Ya no tuve paciencia para esperar a que regresara (Cañedo) y ya les dije, discúlpeme no puedo esperar, tengo compromiso en esta empresa (era arquitecto) y me fui a chambear y hasta ahí acabó mi experiencia profesional. Después seguí jugando en el Interclubes, la Liga española, en fin, el futbol nunca se sale de la sangre de uno”.