La Paz, Baja California Sur. Víctor Castro Cosío, gobernador electo de Baja California Sur (BCS) anunció que su entrega-recepción tendrá como prioridad las acciones de salud, para combatir la pandemia de COVID-19.

A través de un comunicado en redes, dijo haberse abstenido de celebrar con eventos que impliquen aglomeraciones tras su victoria electoral; dijo haberse reunido con el director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo.

“Hablamos de la importancia de contar con su respaldo para atender el repunte de casos en BCS, y quien ya visitó nuestra entidad para dar cuenta de diferentes acciones a seguir, por ejemplo, la ampliación de la capacidad hospitalaria para hacer frente a la emergencia”, anunció Castro.

“He pedido al equipo que coordinará el proceso de entrega-recepción que priorice el tema de salud, particularmente el análisis de las acciones destinadas a atender la pandemia por COVID-19”, escribió en sus redes sociales.

Por otro lado, solicitó a los ciudadanos atender las disposiciones del Comité de Seguridad en Salud, que dirige el todavía gobernador, Carlos Mendoza Davis, con la finalidad de dar seguimiento puntual a sus estrategias.

“Reconozco el esfuerzo que realiza el personal de salud para superar este gran reto. Asimismo, envío un abrazo solidario a todas aquellas familias que han perdido a un ser querido a causa de esta terrible enfermedad”, expuso.

Acompañado del representante del IMSS en BCS, José Luis Ahuja Navarro, el director general, Zoé Robledo recorrió el estacionamiento del Hospital General de Subzona con Medicina Familiar (HGSZ/MF) No. 26, en Los Cabos, donde se instalará el Hospital Temporal de Expansión con 30 camas para atención de pacientes con coronavirus.

Como parte del Plan de Reconversión Hospitalaria en Baja California Sur, en el IMSS también se trabaja en la habilitación de un Hospital Temporal de Expansión en el estacionamiento de la Unidad de Medicina Familiar con Unidad Ambulatoria No. 34 en La Paz.

Se proyecta que dicha infraestructura estará disponible en un tiempo récord de 21 a 25 días, con el objetivo de cumplir la política de cero rechazos a pacientes con COVID-19 y otorgar atención de “calidad y calidez”.