CIUDAD DE MÉXICO. El presidente Andrés Manuel López Obrador corrigió y urgió al gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, a presentar pruebas de un posible fraude electoral ante las autoridades correspondientes, pues no corresponde al Ejecutivo federal atender dichas denuncias.

Durante la mañanera el mandatario federal aclaró que no recibiría esta mañana al gobernador estatal, porque no es facultad del Poder Ejecutivo atender denuncias electorales, pues para ello se tiene que acudir a denunciar ante Instituto Nacional Electoral (INE), Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) o la Fiscalía General de la República (FGR).

 “No recibiré a Silvano Aureoles, porque no me corresponde, porque es un asunto que tiene que ver con las elecciones y para eso está el INE y el Tribunal y si es sobre una acusación de un ilícito hay que acudir a la Fiscalía”, dijo.

López Obrador precisó que si bien recibió en Palacio Nacional a los gobernadores de Chihuahua y Jalisco, Javier Corral y Enrique Alfaro, respectivamente, eso fue para hablar sobre los programas sociales en las entidades y no por denuncias electorales que no competen al Ejecutivo.

"La reunión fue para tratar asuntos de interés en beneficio de los pueblos de Chihuahua, de Morelos y de Jalisco. Con éste último, tendremos una reunión con equipos de trabajo para hacer una revisión de asuntos como el de la presa Zapotillo, obra iniciada desde hace años", comentó.

Además destacó que las quejas de Aureoles Cornejo tienen tintes político-electorales, por lo cual debe cuidar la investidura presidencial.

“No puedo yo estar aquí recibiendo a personas, a autoridades, para atender cuestiones electorales o acusaciones de tinte político. No me corresponde, hay que cuidar la investidura presidencial”, dijo el presidente mientras afuera de Palacio Nacional esperaba el gobernador de Michoacán una audiencia sin previo aviso.