La Paz, Baja California Sur. La sequía que afecta al país ha sido particularmente dañina para el campo sudcaliforniano, donde más de 10 mil cabezas del hato ganadero local han perecido debido a la falta de agua, mientras los ganaderos piden apoyo extraordinario por la emergencia.

La sequía afecta a la entidad desde el año pasado y, de acuerdo con el presidente del Comité Estatal de Fomento y Protección Pecuaria, Manuel Rangel Vázquez, ha provocado la muerte de 10 mil cabezas de ganado mayor, 12.5 por ciento del total. Esto quiere decir que una de cada ocho cabezas de ganado bovino, caprino y ovino perecieron en la sequía que cubre la totalidad del estado.

De acuerdo con el monitor de sequía de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el 31 por ciento del territorio sudcaliforniano presenta sequía severa, pero todo el territorio presenta algún grado de falta de agua. Aunque existe una declaratoria de emergencia, los ganaderos del estado denuncian que no han recibido apoyos extraordinarios tras la declaratoria de desastre natural que se obtuvo a finales del año pasado.

Asociaciones de ganaderos, como la llamada “Rescate de los pueblos y tradiciones”, clausuró de manera simbólica el Congreso del Estado exigiendo la entrega de apoyos. Asimismo, han realizado expresiones ante las Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural y la propia Procuraduría Federal del Consumidor para denunciar la especulación en los precios del forraje y concentrados.

Rangel Vázquez reconoció que, en el primer trimestre del año, alimentos como el forraje y complementos alimenticios incrementaron su precio en 100 y 35 por ciento, respectivamente. Apuntó que, a pesar de la falta de respuesta a la declaratoria anterior, se analiza solicitar una más: debido a que la sequía afecta también abrevaderos y pozos.