La Paz, Baja California Sur.-  Seguirá Baja California Sur (BCS) haciendo historia en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, luego de la clasificación de Gabriela Belén Agúndez García en la prueba de clavados sincronizados de plataforma junto a la jalisciense Alejandra Orozco en la Copa Mundial que tiene lugar en el centro acuático de la capital japonesa, a la que también aspira llegar Aranza Vázquez Montaño, quien compite en el trampolín.

El nombre de Gabriela Agúndez García se unirá a los de Paola Espinosa Sánchez, Raúl Castañeda, Ramiro Reducindo Radilla y Gerardo Martínez Dibene, quienes estuvieron en los Juegos Olímpicos en el periodo 2004-2016, además de los paralímpicos Yazmith Bataz Carballo y Luis Armando Andrade Guillén.

La pareja Agúndez-Orozco finalizó en la quinta posición de la final de los 10 metros con 286.56 puntos, 30 centésimas arriba de las rusas Ekaterina Beliaeva y Lullia Timoshinina que acumularon 286.26 en las cinco rondas de clavados, llevándose las medallas las representantes de Canadá con 305.94, seguidas de Gran Bretaña y Alemania que sumaron 320.88 y 292.86, respectivamente.

Fue una calificación muy sufrida para las mexicanas, porque después de haber pasado en primer lugar la fase preliminar, fueron castigadas por los jueces en las tres primeras rondas abriendo en quinto lugar en el primer clavado, cayendo al noveno en los dos siguientes, mejorando en la cuarta ejecución avanzando dos lugares.

Quedaba un solo clavado, las mexicanas sabían que hasta ese entonces estaban fuera de Tokio 2020, así que había que hacer un buen salto que les redituara una buena calificación, siendo impulsadas desde abajo por el entrenador Iván Bautista, quien sabía que un error terminaría con sus aspiraciones de estar en los Juegos Olímpicos.

Alejandra Orozco hizo el conteo, simultáneamente iniciaron el vuelo en busca del agua dando tres giros en el descenso para luego caer como saetas, emergiendo de la zambullida con la mirada hacia la pizarra para ver las calificaciones que rondaron los 70 puntos, salieron de la piscina, se abrazaron y en ese momento el suspenso se apoderó de sus rostros.

La pizarra se iluminó una vez más dando a conocer los resultados finales, sus nombres estaban en la quinta casilla y fue entonces que la tensión se transformó felicidad al saber que tenían la plaza garantizada para asistir a los Juegos Olímpicos de Tokio.