Ciudad de México.- Al mostrar desde el atril del Salón Tesorería de Palacio Nacional, la tarjeta rosa con la que el candidato del PRI al gobierno de Nuevo León, Adrián de la Garza, ofrece mil 500 pesos bimestrales a quien le otorgue su voto, el presidente Andrés Manuel López Obrador, cuestionó: “donde está el Instituto Nacional Electoral (INE), dónde está el Tribunal Electoral, dónde está la Fiscalía Electoral”.

Al preguntarle si esto señalamientos no violan la ley electoral, afirmó que este tipo de denuncia beneficia a la democracia. “Es bueno para la democracia, y quedarse callado es ser cómplice, y peor, apoyar a candidatos que ofrecen migajas, dádivas, que están comprando el voto. Eso es una ofensa, es una humillación, y es un acto totalmente antidemocrático, quién está financiando, cómo va a cumplir”.

Tras lanzar un “ya basta”, subrayó que hay una reforma constitucional que establece que es delito grave el fraude electoral, pero si no hay denuncia, la constitución, las leye se convierten en letra muerta”.

Recordó que durante años “nosotros nos hicieron muchos fraudes, por décadas padecimos el fraude electoral, de todo tipo. Nos robaron la Presidencia de la República, cómo no voy a denunciar el fraude electoral, si se necesita la democracia, cómo se van a entregar estas tarjetas”.

El mandatario federal pidió que sean los ciudadanos los que elijan a sus representantes, y señaló que el INE “está pensando en quitarle el registro a otra candidata al Gobierno de San Luis Potosí de Morena. Eso es lo más faccioso que pude haber, ya le quitaron el registro a dos, y ahora van por otra, y esto (en referencia a la tarjeta rosa) se tolera”.

López Obrador aseguró que la distribución de las citadas tarjetas “debería de ser motivo de una sanción, pero no hacen nada. Imagínense, traemos una lucha de años en contra del fraude, protestando, caminando en el éxodo por la democracia desde hace años, recibiendo agravios de los medios de información, viendo cómo se llevan a cabo estas cosas, para favorecer a candidatos, cómo grupos de poder, cómo Claudio X González padre, en 2006 financió la guerra sucia en contra de nosotros”.

Indicó que la “mayoría de ellos, participan porque buscan prebendas”, y recordó que tras la elección del presidente Vicente Fox, se ordenó la devolución de los impuestos a una empresa fabricante de jugos, “pero les habló de miles de millones de pesos, que les devolvieron, y quién era el abogado, Diego Fernández de Cevallos”.