La Paz, Baja California Sur. Centenares de personas se reunieron en el monumento conocido como “La Paloma”, entre las calles 5 de Mayo y 16 de Septiembre, sobre el malecón de la capital del estado Portando pancartas, danzando, realizando actividades informativas, contra los cruceros fondeados en la Bahía de La Paz, bajo la consigna “no somos estacionamiento” y formando una valla humana que abarcó desde el callejón La Paz hasta la calle Hidalgo.

Los colectivos “en defensa del territorio”, el Colectivo de Académicos Sudcalifornianos (CAS), de representantes de las asociaciones de permisionarios turísticos y la sociedad en general, se reunieron desde las seis de la tarde para realizar una manifestación pacífica contra la llegada de cruceros turísticos vacíos que tomaron la Bahía de La Paz como resguardo luego del colapso de la industria por la pandemia de coronavirus, estando técnicamente a la deriva desde los brotes de coronavirus en distintos cruceros que provocaron alarma, una prolongada cuarentena y la pérdida de un número aún indefinido por contagios en el ambiente confinado que generan estas embarcaciones.

A 20 días de las primeras denuncias que evidencian la mancha negra de combustible quemado que emiten estas embarcaciones, y que hasta la fecha no ha sido comprobada por las autoridades, los activistas realizaron diversas expresiones. Alexandra Álvarez, doctora en ciencias marinas, reiteró su llamado a las autoridades a detener la llegada de estas embarcaciones, que, si bien están “vacías”, requieren de cientos de personas para su operación y fondeo y tienen maquinaria para albergar hasta a 3 mil personas, por lo que requieren mantenimiento constante.

Al lanzar estas expresiones recordaron que la Bahía de La Paz tiene varios sitios incluidos, por acuerdos internacionales, en lo mecanismos de protección de los humedales (RAMSAR), y es un sitio de refugio del tiburón ballena, especie considerada amenazada y que es central para una economía basada en el turismo de aventura junto con mamíferos marinos, mantarrayas gigantes y otras especies de interés comercial. 

A falta de un puerto adecuado para manejar sus desechos, la amenaza de un movimiento de aguas negras, combustible quemado, smog, basura y otros contaminantes continua latente en la Bahía de La Paz, donde seis mega embarcaciones de las empresas Holland America y Princess Cruises llevan más de dos meses operando pues, debido a sus dimensiones no pueden apagar motores o detener sistemas que están diseñados para funcionar de manera continua en altamar.

Los manifestantes instalaron un buzón de expresiones, entre las cuales se planteó la rendición de cuentas por parte de las autoridades estatales como la Agencia Portuaria Integral (API), Capitanía de Puerto (SCT), la Secretaría de Marina (Semar) y las agencias de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) encargadas de la protección al ambiente (Profepa) y las áreas naturales (Conanp).