• En las últimas semanas estuvieron concentradas en el Centro Nacional de Alto Rendimiento de la CONADE, donde, incluso, les fue aplicada la vacuna contra el COVID19 considerando el viaje a Tokio para la copa del mundo que fue cancelada en su fecha original, anunciando la Federación Internacional de Natación que se iba a realizar a principios de mayo.
La Paz, Baja California Sur.- La
madrugada del martes las clavadistas Aranza Vázquez Montaño y Gabriela Agúndez
García, además del entrenador Yohandy Núñez Vázquez, viajarán a Tokio, Japón
integradas a la selección nacional de clavados que el fin de semana intervendrá
en la Copa Mundial de Clavados, buscando ganar algunos de los boletos
disponibles en las pruebas de trampolín y plataforma para los Juegos Olímpicos
que se efectuarán en esa misma sede.
Ambas deportistas están a unos
cuantos días de conseguir el objetivo por el que tanto se han esforzado durante
varios meses y por el que han sacrificado no solo tiempo, sino algo tan valioso
como es la familia al permanecer durante mucho tiempo fuera de casa para
realizar sus entrenamientos.
En las últimas semanas
estuvieron concentradas en el Centro Nacional de Alto Rendimiento de la CONADE,
donde, incluso, les fue aplicada la vacuna contra el COVID19 considerando el
viaje a Tokio para la copa del mundo que fue cancelada en su fecha original,
anunciando la Federación Internacional de Natación que se iba a realizar a
principios de mayo.
Sin embargo, el evento se hará
justo cuando el gobierno de Japón ha decidido imponer medidas restrictivas para
algunas ciudades, entre ellas la próxima sede de los Juegos Olímpicos, debido a
una nueva ola de contagios de la pandemia del SARS COV2.
Las deportistas tendrán que
tener el temple suficiente para sobreponerse a este tipo de adversidades y
demostrar lo que tienen en sus respectivos eventos, para conseguir las plazas
para México y dejar en manos de la Federación Mexicana de Natación la decisión
de quienes serán las atletas que estarán en Tokio a mediados de julio
compitiendo el torneo olímpico, pensando, claro, que sean ellas mismas las que
defiendan el uniforme tricolor.