• Si el partido se queda sin mayoría en la Cámara de Diputados el próximo 6 de junio, promoverá un extraordinario para modificar la ley y meter en cintura al árbitro electoral
CIUDAD DE MÉXICO.-De perder la mayoría en la Cámara de Diputados en los
comicios del próximo 6 de junio, Morena y sus aliados políticos impulsarán la
realización de un periodo extraordinario para modificar las leyes electorales,
adelantó en entrevista Ricardo Monreal, coordinador de la bancada morenista en
el Senado de la República.
Para ello, estas fuerzas políticas harían valer la mayoría calificada
que tendrán en la próxima Comisión Permanente, ya que, debido al número de
diputados y senadores que ostentan, alcanzarían 67.5% del poder de voto. Por sí
sola, Morena tendrá 51.3 por ciento.
“Vemos que el árbitro (INE) por momentos se
convierte en parte y abandona su labor de arbitraje imparcial”, consideró
Monreal, motivo por el cual procesarían la reforma en julio o agosto, como una
“estrategia política y legislativa”. En tanto, si Morena mantiene la mayoría,
la reforma se iría hasta el primer periodo de sesiones de la próxima
Legislatura.
En 2007, por presión del PRD, el Senado avaló una
reforma electoral que ordenó, entre otras cosas, la salida del entonces
presidente del IFE y otros dos consejeros.
Morena afila las navajas contra el
INE
En caso de perder las elecciones del 6 de junio,
legisladores de Morena y sus aliados convocarían a un extra para modificar las
leyes electorales.
Si pierde las elecciones el 6 de junio, Morena y
sus aliados políticos usarán la mayoría calificada que tendrán este año por
primera vez en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión para convocar a
un periodo extraordinario, a fin de modificar las leyes electorales, porque
“vemos que el árbitro (INE) por momentos se convierte en parte y abandona su
labor de arbitraje imparcial”, anunció Ricardo Monreal.
En entrevista, el líder de los senadores de Morena
precisó las previsiones que tiene para procesar la reforma electoral.
“Puede ser en julio-agosto o incluso puede ser en
el primer periodo de sesiones, pero es inevitable. El resultado electoral es el
que nos llevará a la posibilidad de la modificación”, aclaró.
—Si ustedes se quedan con la mayoría absoluta en
Cámara de Diputados, ¿la llevarían al periodo ordinario?
—Sí.
—Si ustedes pierden la mayoría absoluta en San
Lázaro, ¿la llevarían a un extraordinario?
–Sí. Nadie se debe de extrañar que es estrategia
política y legislativa. Es nuestra estrategia. Yo tengo confianza que la
llevaremos hasta el primer periodo de sesiones, porque tengo confianza en que
mantendremos la mayoría legislativa en la Cámara de Diputados.
Por presión del PRD, en 2007, el Senado aprobó una
reforma constitucional en materia electoral, que en el Cuarto Transitorio
ordenó la salida de Luis Carlos Ugalde, entonces presidente del IFE, así como
de otros dos consejeros; además, modificó el periodo de permanencia de los ocho
restantes para que los nombramientos fueran escalonados; es decir, ya una
presión de la izquierda llevó a destituir a un presidente del árbitro
electoral, aunque ahora a Morena no le alcanza para una reforma constitucional.
Por primera vez en el último cuarto de siglo,
Morena está en el escenario de convertirse en la primera fuerza política que,
por sí misma tendrá, 51.3% del poder de voto en la próxima Comisión Permanente
del Congreso de la Unión y, junto con sus aliados, alcanzará la mayoría
calificada, con 67.5%, para convocar a los periodos extraordinarios que
considere necesarios antes de terminar esta Legislatura.
El epicentro del nuevo poder de Morena es el
Senado, donde esta semana los grupos parlamentarios abren la negociación para
la integración de la Comisión Permanente, con una correlación de fuerzas
diferente a la que tuvieron el año pasado, dada la decisión de senadoras del
PRI, MC y PVEM de sumarse a las filas de Morena, lo que provocó que el PRD esté
en riesgo de perder el único lugar que tiene en la Permanente.
Morena pasó de 60 a 63 integrantes, entre 2020 y
2021, lo que implica un aumento de 47.6% a 49.2%, en el poder interno del
Senado, lo que se traduce en su derecho a tener nueve integrantes en la
Permanente a partir del 1 de mayo, no los ocho que tuvo el año pasado,; un
lugar que pone en riesgo la permanencia del perredismo.
El año pasado, el voto del senador Miguel Ángel
Mancera frenó, en tres ocasiones, las intenciones de Morena de abrir un periodo
extraordinario para eliminar fideicomisos y aumentar las facultades del Poder
Ejecutivo para modificar el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).
Ricardo Monreal confirmó ayer a este diario que “en
el grupo se ha opinado que no, que vamos a tener estrictamente lo que nos
corresponde, de acuerdo con los número. Y es que en la última etapa Morena se
fortaleció con tres asientos más”.
Recordó que “desde dos ocasiones pasadas, nosotros
aceptamos, aun cuando no tenía el PRD el número suficiente de asientos, que el
PRD tuviera un representante”.